Inspenet, 11 de agosto 2023.
Después del incidente con el sumergible Titán, la compañía no se rinde y ahora OceanGate tiene en mente un ambicioso plan: llevar una colonia humana de 1.000 individuos a Venus, uno de los planetas más inhóspitos del sistema solar.
En una reciente entrevista con “Insider”, Guillermo Söhnlein, uno de los cofundadores de OceanGate, ha dado a conocer su nuevo proyecto denominado Humans2Venus. El objetivo de este proyecto es establecer una colonia en la atmósfera de Venus para albergar a 1.000 personas para el año 2050.
La ambiciosa idea de OceanGate
Aunque menos ambiciosa en comparación con las propuestas de Elon Musk para colonizar Marte, donde busca llevar a un millón de personas, la iniciativa de OceanGate se enfrenta a desafíos únicos debido a las condiciones extremas del planeta. Söhnlein argumenta que investigaciones recientes han identificado una franja en la atmósfera venusiana con condiciones de temperatura y presión más similares a las de la Tierra, lo que permitiría establecer una colonia flotante.
La propuesta no implica llevar a los seres humanos a la peligrosa superficie de Venus, lo cual sería completamente inviable con la tecnología actual debido a las extremas condiciones del planeta. En cambio, la idea se centra en establecer una presencia humana en su órbita. El ejecutivo considera factible crear una estación orbital a unos 48 kilómetros de la superficie venusiana, proporcionando así un entorno adecuado para que una colonia humana pueda asentarse y prosperar.
Venus ha captado cada vez más la atención de los astrónomos y es a menudo llamado el “hermano” de la Tierra debido a ciertas similitudes en edad y composición, a pesar de sus marcadas diferencias. Algunos científicos han propuesto misiones tripuladas a Venus con el propósito de explorar su órbita y desplegar drones y sondas atmosféricas.
Es importante destacar que, si bien la temperatura promedio en la superficie de Venus es de alrededor de 462° Celsius, esta cifra cambia en su atmósfera. A altitudes más elevadas, las temperaturas descienden a niveles que podrían ser tolerables para la vida humana, oscilando entre 0 y 50° Celsius. Según el cofundador de OceanGate, esta circunstancia podría permitir la existencia de agua líquida.
“Otro argumento utilizado por Söhnlein para respaldar su propuesta se centra en la capacidad de Venus para protegerse de la radiación solar. La interacción entre la luz ultravioleta proveniente del Sol y la densa atmósfera del planeta genera un campo magnético que actúa como un escudo protector. Este campo desvía las partículas hacia el sistema solar en lugar de permitir que penetren en Venus.
No obstante, es importante reconocer que Venus es un entorno extremadamente tóxico, lo que lo ha posicionado como uno de los últimos lugares considerados viables por los científicos para albergar vida o establecer una colonia humana. Su atmósfera densa está compuesta por elementos corrosivos y venenosos, lo que implicaría la necesidad de diseñar una estación espacial capaz de resistir compuestos como el ácido sulfúrico presente en las nubes.
A pesar de los desafíos y de ciertas dudas que puedan surgir debido al incidente con el submarino Titán, Söhnlein sigue defendiendo su visión de un posible avance significativo para la humanidad, instando a no subestimar esta oportunidad.