En Puerto Chacabuco, uno de los terminales más australes de Sudamérica, comenzó a operar el Trapananda: el primer remolcador eléctrico en América Latina. Esta unidad representa un hito para la industria marítima regional gracias a su propulsión a través de baterías de ion-litio suministradas por Corvus Energy, uno de los líderes globales en almacenamiento energético marino.
SAAM y ENAP impulsan remolcador eléctrico
El Trapananda es fruto de la colaboración entre SAAM Towage, la compañía de remolque más grande del continente, y la petrolera estatal chilena ENAP. El diseño fue desarrollado por Robert Allan Ltd. y su construcción estuvo a cargo de los astilleros SANMAR.
Con 25 metros de eslora, 13 de manga y una capacidad de tiro de 70 toneladas, el buque está preparado para operar en condiciones portuarias complejas, prestando servicios a buques de gran calado.
Tecnología probada y visión sustentable
El sistema de baterías instalado, del tipo Corvus Orca ESS, cuenta con una capacidad de 3.616 kWh. Esta tecnología ya ha sido utilizada exitosamente por SAAM en los remolcadores eléctricos que operan en Vancouver, Canadá. Según la compañía, estas embarcaciones han logrado reducir en un 72% la intensidad de carbono durante el primer año de operación y proyectan alcanzar un 90% de reducción en el segundo año.
El Trapananda se integra en la Estrategia de Sostenibilidad 2030 de SAAM, que contempla la neutralización del 65% de las emisiones de gases de efecto invernadero de su flota. A esto se suman beneficios operativos como menores costos de mantenimiento y eliminación del consumo de combustible fósil.
Un modelo de electrificación para el sector portuario
La puesta en marcha del Trapananda consolida el avance de SAAM Towage hacia una operación descarbonizada en América Latina. Al mismo tiempo, posiciona a Corvus Energy como proveedor clave en la electrificación del transporte marítimo regional.
Desde la compañía noruega destacan que el crecimiento del uso de sistemas de energía embarcada a batería está acelerando la transición hacia puertos más limpios y eficientes. Más de 700 buques en todo el mundo operan actualmente con soluciones Corvus, lo que refuerza la madurez de esta tecnología.
Proyección para la industria marítima del continente
Con esta incorporación, SAAM suma ya tres remolcadores eléctricos de batería en su flota, reforzando su liderazgo como operador cero emisiones. El caso del Trapananda sirve como referencia para otros puertos latinoamericanos que buscan integrar soluciones sostenibles sin comprometer capacidad ni potencia de maniobra.
La electrificación de los remolcadores representa una solución concreta para reducir la huella ambiental del transporte marítimo, particularmente en entornos portuarios con alto tráfico y sensibilidad ecológica.
Fuente y foto: Corvus Energy