El tren Maglev de alta velocidad de China en Shanghai, que batió récord como el tren más rápido del mundo, conecta la estación de Longyang Road, dentro de la bulliciosa metrópolis, con el aeropuerto de Pudong y el trayecto de 19 millas dura aproximadamente siete minutos.
En una prueba, alcanzó una velocidad de 453 km/h, lo que lo convirtió en el tren más rápido del mundo y se aspira que una vez esté pleno rendimiento, sus ingenieros esperan que alcance los 1.000 km/h.
Levitación magnética: el “secreto” del tren más rápido del mundo
Este método contrarresta los efectos de la gravedad para permitir que el tren se deslice por el aire y avance adecuadamente, lo cual permite que el tren sea más silencioso y ofrezca un viaje más suave, pues elimina el contacto con las vías, reduciendo la fricción y permitiendo que el tren “vuele” sobre el suelo.
La hazaña, que es aparentemente imposible, la logra utilizando imanes superconductores en un conducto de bajo vacío. Dichos imanes son repelidos por la tubería metálica para crear un colchón de aire entre ellos y su enfriamiento refuerza aún más el campo magnético.
Y, a diferencia de las vías de tren tradicionales, los animales pueden cruzar con seguridad por debajo de este tren.
Cabe destacar que el país planea extender esta tecnología por todo el país, formando parte del decimocuarto plan quinquenal del país (2021 y 2025), conocido como Proyecto de Innovación Tecnológica China Railway 450 (CR450).
Los responsables esperan que la CR450 facilite los desplazamientos y reduzca el tiempo de viaje entre las zonas rurales y las grandes ciudades. También debería reducir las emisiones de contaminación atmosférica procedentes del transporte para la inmensa población.
Otro aspecto importante, es el hecho de que China prevé que sus emisiones de carbono alcancen su punto máximo en 2030 y sean neutras en 2060. Bajo este contexto, los trenes de levitación magnética no generan emisiones directas.
Con cero emisiones directas y la capacidad de permitir que la fauna cruce de manera segura por debajo de sus vías, Maglev no solo es el tren más rápido del mundo, sino también una promesa de un futuro más sostenible y eficiente en el transporte. Este tren superrápido podría estar operando a plena capacidad en un plazo de tres a diez años, marcando el inicio de una nueva era en la movilidad humana.
¡No te pierdas ninguna de nuestras publicaciones y síguenos en las redes sociales!
Inspenet.com YouTube LinkedIn Facebook Instagram
Video: New China TV
Cargando...
