Inspenet, 21 de septiembre 2023.
Durante las últimas semanas, laboratorios de todo el mundo se han sumergido en una competición para desarrollar el LK-99, un nuevo material que, según científicos de Corea del Sur, mostraba propiedades de superconductividad en condiciones de temperatura y presión ambiente.
La mayoría de los materiales, especialmente los metales, solo pueden lograr la superconductividad (es decir, la resistencia eléctrica nula) a temperaturas cercanas al cero absoluto. Sin embargo, el LK-99 aparentemente había logrado ese notable avance a temperaturas y presiones que se encuentran de manera natural en todo el planeta.
Ese emocionante anuncio generó una ola de entusiasmo tanto en línea como en los laboratorios de física en todo el mundo. El New York Times apodó al LK-99 como el “superconductor del verano” y la anticipación de la validación por parte de otros expertos se ha convertido en una obsesión viral.
Sin embargo, los físicos especializados en materia condensada siempre mantuvieron una postura cautelosa, expresando dudas sobre la credibilidad del Centro de Investigación de Energía Cuántica que produjo la muestra del mencionado material y cuestionando algunos de los detalles extraordinarios presentados en el artículo original.
Adiós ilusión: El LK-99 no es lo que todos esperaban
De acuerdo con lo compartido por el Centro de Teoría de la Materia Condensada (CMTC) de la Universidad de Maryland en una serie de publicaciones en X, el Centro Internacional de Materiales Cuánticos (ICQM) de China ha informado que el LK-99 no muestra superconductividad, sino lo que se conoce como “ferromagnetismo”. Además, el CMCT subraya que la resistividad del LK-99 a temperatura ambiente es aproximadamente mil millones de veces mayor que la del cobre y lo etiqueta como un “Anti-SC”.
Aunque fenómenos como el diamagnetismo y el ferromagnetismo presentan sus propias características magnéticas, no son raros en absoluto. Como sugiere el CMCT, estas propiedades magnéticas no tienen aplicaciones prácticas significativas en situaciones del mundo real.
Así mismo, las recientes pruebas han dejado sin efecto la esperanza de encontrar un nuevo material superconductor revolucionario, un logro que sería equiparable al descubrimiento de la inducción electromagnética o la invención del primer transistor.
La existencia de un superconductor a temperatura ambiente alteraría las reglas en el campo de la ingeniería eléctrica, llevando la resistencia eléctrica nula de los laboratorios científicos de alta tecnología, como los aceleradores de partículas del CERN, los reactores de fusión del ITER o las computadoras cuánticas de Google, a nuestra vida diaria. Esto haría que la red eléctrica, los dispositivos y todo lo que depende de la carga eléctrica funcionara de manera considerablemente más eficiente que en la actualidad.
Sin embargo, por ahora, este sueño permanece fuera de alcance. A pesar de esta realidad, los científicos de todo el mundo siguen esforzándose para desentrañar los misterios cuánticos detrás de la superconductividad, con la esperanza de que algún día este deseado sueño pueda hacerse realidad.
Fuente y foto: https://www.esquire.com/es/tecnologia/a44781603/lk-99-no-es-superconductor/
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