Google Quantum AI ha dado un paso trascendental en el campo de la computación cuántica con la presentación de Willow, su nuevo chip cuántico de última generación. Este avance destaca por su rendimiento superior en varias métricas clave y por su capacidad para resolver uno de los problemas más persistentes en la computación cuántica: la corrección de errores.
¿Qué hace el chip cuántico Willow?
Desde su fundación en 2012, Google Quantum AI ha perseguido una visión audaz: desarrollar una computadora cuántica a gran escala que sea capaz de resolver problemas que los ordenadores clásicos no pueden abordar. Con Willow, Google ha demostrado un progreso impresionante hacia ese objetivo, reduciendo drásticamente los errores cuánticos a medida que aumenta la cantidad de qubits.
Este avance histórico, denominado “por debajo del umbral”, significa que es posible escalar un sistema cuántico sin que los errores aumenten exponencialmente, lo que abre la puerta a computadoras cuánticas útiles.
Una de las pruebas más impresionantes realizadas con Willow fue su capacidad para realizar un cálculo que, a una de las supercomputadoras más rápidas actuales, le tomaría 10 septillones de años completar. En tan solo cinco minutos, Willow resolvió un cálculo que supera por mucho las capacidades de las máquinas clásicas. Este rendimiento demuestra la capacidad de la computación cuántica para superar las limitaciones de los sistemas tradicionales y ofrecer soluciones mucho más rápidas y eficientes.
Willow, el chip cuántico de Google: 10 septillones de años en 5 minutos. Fuente: Google Quantum AI
¡La corrección de errores cuánticos ahora es posible!
La corrección de errores cuánticos ha sido uno de los mayores desafíos en la computación cuántica. Cuantos más qubits se usan, mayor es la probabilidad de que ocurran errores que interfieran con el cálculo. Sin embargo, Willow ha logrado reducir la tasa de errores exponencialmente a medida que se incrementa la cantidad de qubits, una hazaña que nunca antes se había alcanzado.
Este avance es fundamental para la viabilidad a gran escala de los ordenadores cuánticos y ha sido validado mediante pruebas en las que las matrices de qubits alcanzaron niveles de corrección sin precedentes.
Además de su rendimiento en pruebas estándar, el chip Willow también tiene un impacto directo en el futuro de la computación cuántica práctica. Con 105 qubits de alta calidad, el chip establece nuevos estándares para los puntos de referencia de rendimiento, superando incluso las métricas de la generación anterior de chips cuánticos. Este progreso tiene aplicaciones potenciales en áreas clave como el descubrimiento de fármacos, la optimización de baterías para vehículos eléctricos, y la energía renovable.
La computación cuántica de Google resolverá problemas reales
Hartmut Neven, fundador de Google Quantum AI, ha destacado que la computación cuántica no solo tiene el potencial de transformar la tecnología por sí misma, también será crucial para avanzar en áreas como la IA avanzada.
La capacidad de la computación cuántica para procesar enormes cantidades de datos de manera más eficiente será esencial para entrenar arquitecturas de aprendizaje complejas, modelar sistemas cuánticos y resolver problemas comerciales del mundo real. Con el software de código abierto y recursos educativos como el curso en Coursera, Google invita a investigadores y desarrolladores a unirse a este viaje hacia el futuro de la tecnología cuántica.
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Fuente y foto: Google
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