Inspenet, 17 de enero de 2023
El presidente y director ejecutivo del American Petroleum Institute (API), Mike Sommers, presentó un nuevo informe que describe las políticas necesarias para hacer, mover y mejorar la energía estadounidense y priorizar el gas natural y el petróleo de EE. UU. como un activo estratégico a largo plazo durante el evento anual del Estado de la Energía Estadounidense de API.
“El estado de la energía estadounidense es fuerte y resistente”, dijo Sommers en su discurso de apertura. “Pero necesitamos políticas para mejorar la cadena de suministro de energía estadounidense y no obstaculizarla. El Estado de la Energía Estadounidense podría ser mucho más fuerte a través de la cooperación bipartidista, una reversión de la retórica de la Administración y políticas serias que alienten la inversión y permitan el desarrollo”.
Durante el evento, con la presencia de la vicepresidenta ejecutiva y directora de defensa de API, Amanda Eversole, la presidenta del Comité de Comercio y Energía de la Cámara de Representantes, Cathy McMorris Rodgers (WA-05), y los representantes de EE. UU. Henry Cuellar (TX-28), Lizzie Fletcher (TX-07), y Mary Peltola (AK-AL), API anunció un plan para el Congreso 118 para hacer, mover y mejorar la energía de Estados Unidos. A medida que los consumidores enfrentan crecientes costos de energía, API insta a los legisladores a adoptar un enfoque más realista y garantizar que el gas natural y el petróleo estadounidenses se prioricen como activos estratégicos a largo plazo.
El tema del Estado de la Energía Estadounidense de 2023, «La solución está aquí», y el nuevo informe se centran en tres componentes principales:
Hacer: Levantar las restricciones sobre el desarrollo de energía en aguas y tierras federales podría aumentar la producción de energía doméstica y aumentar la inversión en la economía de EEUU, según un nuevo estudio de Rystad.
Mover: La nueva infraestructura de gasoductos en el noreste podría agregar 4.6 bcf por día de gas natural e invertir miles de millones localmente.
Mejorar: la energía estadounidense se produce con los estándares ambientales más altos del mundo y está liderando el camino hacia un futuro con menos carbono.
“Sabemos que la solución está aquí. La política gubernamental debe reflejar nuestra abundancia de recursos, nuestra capacidad para construir y nuestra voluntad de mejorar en cada paso del camino”, concluyó Sommers. “API y nuestra industria están aquí para ello. Listos para hacer el trabajo. Listos para dedicar tiempo, este año, con esta administración, con este nuevo Congreso, para diseñar y promulgar políticas bipartidistas para producir, mover y mejorar la energía estadounidense”.
API representa todos los segmentos de la industria del petróleo y el gas natural de Estados Unidos, que genera más de 11 millones de puestos de trabajo en Estados Unidos. API se formó en 1919 como una organización de establecimiento de estándares y ha desarrollado más de 800 normas para mejorar la seguridad, eficiencia y sustentabilidad operativa y ambiental.
Foto: ShutterStock
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