Empoderamiento de la gerencia operacional mediante estilos de liderazgo

Introducción

En el volátil entorno empresarial contemporáneo, el empoderamiento en el liderazgo se convierte en un dinamizador del éxito de la gerencia operacional. Este artículo se enfoca en explorar la relación entre el empoderamiento, el liderazgo y los estilos de liderazgo en el contexto de la gerencia operacional, destacando la importancia de este enfoque gerencial y sus implicaciones para el rendimiento organizacional.

El empoderamiento en el liderazgo se refiere al proceso mediante el cual los líderes delegan autoridad y responsabilidad a los miembros de su equipo, permitiéndoles asumir un mayor control sobre su trabajo y contribuir de manera significativa al logro de los objetivos organizacionales.

Empoderamiento y la influencia del liderazgo en la gerencia operacional

El empoderamiento en el liderazgo es un concepto fundamental en el ámbito empresarial, donde los líderes desempeñan un papel clave en la promoción de un entorno que fomente la autonomía, la responsabilidad y la participación de los miembros del equipo.

Empoderamiento en el liderazgo

Este término se refiere al proceso mediante el cual los líderes delegan autoridad y responsabilidad a sus colaboradores, permitiéndoles tomar decisiones y asumir un mayor control sobre su trabajo. En este contexto, el liderazgo se concibe como una herramienta para empoderar a los colaboradores, brindándoles la confianza y los recursos necesarios para contribuir de manera significativa al logro de los objetivos organizacionales.

Por otra parte, la influencia del liderazgo en la gerencia operacional es innegable. Los estilos de liderazgo adoptados por los gerentes y líderes tienen un impacto directo en la gerencia de operaciones, evidenciada en la eficiencia y la efectividad de las operaciones. Por ejemplo, un liderazgo autoritario puede limitar la iniciativa y la creatividad de los empleados, lo que a su vez puede obstaculizar la innovación y la resolución de problemas en el ámbito operativo. Por otro lado, un liderazgo persuasivo puede motivar a los colaboradores a asumir responsabilidades y aportar nuevas ideas, lo que contribuye a mejorar la calidad y la eficiencia de las operaciones.

En consecuencia, el empoderamiento en el liderazgo no solo tiene el potencial de mejorar el rendimiento individual y colectivo de los empleados, sino que también influye en la gestión operacional de la organización en su conjunto. Al promover un liderazgo que fomente el empoderamiento, las empresas pueden optimizar sus procesos operativos y alcanzar un mayor nivel de competitividad en el mercado.

Recordemos que, en el contexto del ámbito operacional, con el objetivo de cumplir requerimientos de seguridad, resulta de vital importancia seguir normas y procedimientos, en este sentido el líder debe ser muy claro en sus instrucciones para con sus colaboradores, a la par que debe fomentar el pensamiento crítico para la toma de decisiones y resolución de problemas.

Estilos de liderazgo y sus enfoques gerenciales

Los estilos de liderazgo influyen en la configuración de los enfoques gerenciales dentro de una organización. Los estilos de liderazgo tienen sus propios atributos y efectos en la gestión operacional y el empoderamiento, configurándose como estilos gerenciales.

A continuación se presenta un video con un contenido muy valioso para los que lideran y forman parte de un equipo, cortesía de: TEDxCharlas TEDx.

Investigadores de la Universidad de Michigan centraron sus estudios en las relaciones entre la conducta del líder, los procesos, prácticas grupales y los indicadores empleados para medir el desempeño del grupo. Lograron identificar tres tipos de comportamientos de liderazgo para diferenciar líderes eficaces de ineficaces:

• Líderes centrados en funciones orientadas a las tareas, planificación y organización del trabajo.
• Líderes orientados en las relaciones con los colaboradores.
• Líderes participativos más orientados a la supervisión que al control.

Esta clasificación fundamenta estudios posteriores centrados en definir estilos de liderazgo.

Los estilos de liderazgo más utilizados en las organizaciones contemporáneas varían según las necesidades específicas de cada situación y el contexto en el que se encuentran. Algunos de los estilos de liderazgo más comunes incluyen:

• Liderazgo transformacional: Este estilo de liderazgo se centra en inspirar y motivar a los miembros del equipo hacia la consecución de una visión compartida. Los líderes transformacionales suelen ser carismáticos y capaces de generar un alto grado de compromiso y entusiasmo en sus seguidores.
• Liderazgo transaccional: En este estilo de liderazgo, los líderes establecen un intercambio o transacción con los miembros del equipo, ofreciendo recompensas a cambio del cumplimiento de objetivos y metas específicas. Se basa en el principio de recompensa y castigo.
• Liderazgo situacional: Este enfoque reconoce que no existe un único estilo de liderazgo efectivo en todas las situaciones, y que los líderes deben adaptar su estilo de liderazgo según las necesidades y características de cada situación y de los miembros del equipo. Para analizar en profundidad este estilo, deben considerarse aspectos relacionados con las cuestiones técnicas de las tareas, la relación entre el líder y el colaborador, la situación, el nivel de madurez de los colaboradores. De allí se desencadenan varios estilos como el persuasivo, directivo, participativo y delegativo.
• Liderazgo participativo: Los líderes participativos fomentan la participación activa de los miembros del equipo en la toma de decisiones y la resolución de problemas. Se basa en el principio de la colaboración y el trabajo en equipo.
• Liderazgo autocrático: En este estilo de liderazgo, el líder toma decisiones de forma unilateral y ejerce un alto grado de control sobre los miembros del equipo. Se basa en el principio de autoridad y jerarquía.
• Liderazgo democrático: Los líderes democráticos fomentan la participación de los miembros del equipo en la toma de decisiones, pero mantienen la responsabilidad final de la toma de decisiones en manos del líder. Se basa en el principio de la participación y la democracia.

De esta forma se evidencia cómo los diferentes estilos de liderazgo tienen efectos distintos en los estilos gerenciales, la gestión operacional y el empoderamiento gerencial. Al comprender las características y los efectos de cada estilo, los líderes pueden adoptar enfoques gerenciales más efectivos para mejorar el rendimiento y la eficiencia de sus equipos y organizaciones.

Empoderamiento gerencial como estrategia para la mejora de la gestión operacional

Para promover el empoderamiento en el equipo, los líderes pueden implementar diversas estrategias. Por lo cual, es fundamental establecer una cultura que valore la autonomía, la participación y la responsabilidad de los empleados. Esto puede lograrse mediante la creación de estructuras de trabajo flexibles, donde se fomente la comunicación abierta y la retroalimentación constructiva. Además, proporcionar oportunidades de desarrollo profesional y capacitación puede ayudar a fortalecer las habilidades y la confianza de los colaboradores, preparándolos para asumir roles de mayor responsabilidad.

La influencia del empoderamiento en la eficacia operacional puede observarse en el día a día de las organizaciones. Por ejemplo, una empresa que implementa un modelo de liderazgo participativo y persuasivo puede experimentar una mayor agilidad y adaptabilidad en sus operaciones. Los empleados se sienten más motivados y comprometidos, lo que se traduce en un aumento de la productividad y la calidad del trabajo. Además, al promover una cultura de innovación y aprendizaje continuo, el empoderamiento puede facilitar la identificación y resolución de problemas de manera más eficiente, permitiendo a la organización mantenerse competitiva en un entorno empresarial en constante cambio.

En la gerencia operacional, donde se prioriza el logro de objetivos, la eficiencia en la producción, el rendimiento óptimo y la continuidad del negocio, los colaboradores confían en la información proporcionada por sus líderes. Además, estos líderes tienen un amplio alcance de control, lo que requiere un alto nivel de estructuración en sus acciones. Sin embargo, esta estructuración no debe descuidar aspectos fundamentales como la confianza en los empleados, la satisfacción de sus necesidades y la creación de un entorno de bienestar que fomente la productividad y el compromiso.

El poder se define como la capacidad potencial de una persona para moldear el comportamiento de otros, induciéndolos a actuar conforme a sus deseos, mientras evita ser coaccionada a realizar acciones no deseadas por parte de terceros. Este concepto implica tanto la habilidad para persuadir y motivar como la capacidad de resistir influencias externas no deseadas. En el contexto operacional, el manejo del poder está estrechamente vinculado a la pericia técnica. Por lo tanto, las figuras de autoridad y los líderes pueden enfrentar desafíos en términos de aceptación de su autoridad, especialmente cuando el líder no es la misma persona que ostenta la autoridad formal.

En esa situación, se recomienda establecer una comunicación clara y transparente entre el líder y la figura de autoridad que detenta el poder formal. Es importante definir roles y responsabilidades de manera precisa para evitar conflictos y asegurar una colaboración efectiva. Además, el líder debe demostrar su competencia técnica y habilidades de liderazgo para ganarse la confianza y el respeto de la autoridad formal. Es determinante trabajar en equipo, respetando las competencias y contribuciones de cada parte, con el objetivo de alcanzar los objetivos organizacionales de manera armoniosa y eficiente.

Conclusión

El empoderamiento en la gerencia operacional a través de diferentes estilos de liderazgo emerge como un factor significativo para el éxito organizacional. El liderazgo efectivo, al delegar autoridad y responsabilidad, puede fortalecer la participación y el compromiso de los miembros del equipo en la consecución de los objetivos operacionales. Destacando la importancia de este enfoque, se resalta la necesidad de que los líderes implementen estrategias de liderazgo específicas para fomentar el empoderamiento dentro de sus equipos, contribuyendo así a un desempeño óptimo y una gestión operacional eficaz.

Algunas recomendaciones clave incluyen

• Establecer expectativas claras: Los líderes deben comunicar de manera asertiva los objetivos y las expectativas del equipo, proporcionando orientación y claridad sobre las responsabilidades de cada miembro.
• Proporcionar apoyo y recursos: Se debe brindar el apoyo necesario, en términos de recursos materiales, capacitación y desarrollo profesional, para que los empleados puedan desempeñarse de manera óptima en sus funciones.
• Fomentar la colaboración y el trabajo en equipo: Promover un ambiente de trabajo colaborativo donde se valoren las ideas y contribuciones de todos los miembros del equipo es esencial para mejorar la eficacia operacional.
• Incentivar la toma de decisiones participativa: Los líderes deben alentar la participación activa de los empleados en la toma de decisiones relacionadas con su trabajo, lo que no solo fortalece su sentido de pertenencia y compromiso, sino que también puede conducir a mejores resultados operacionales.
• Promover una cultura de aprendizaje y mejora continua: Fomentar un entorno donde se valore el aprendizaje y la mejora constante, alentando a los empleados a buscar nuevas formas de abordar los desafíos operacionales y a aprender de los errores.

Estas recomendaciones pueden ser útiles para fortalecer el empoderamiento en los equipos y mejorar la eficacia de la gestión operacional en conjunto.

Si quieres conocer más acerca del liderazgo en las organizaciones te invitamos a revisar el artículo: Liderazgo organizacional: Descubre los secretos para transformar tu equipo

Referencias

1. Sharma, Robin. (2010). El líder que no tenía cargo. Penguin Random House Grupo Editorial España
2. Carreño, Francisco (2012). Esencia de líder. CreateSpace Independent Publishing Platform