El portacontenedores Beijing Maersk, recientemente incorporado a la flota de Maersk, ya opera con un sistema orientado a reducir su impacto ambiental.
Este buque, fabricado por HD Hyundai Heavy Industries, fue entregado oficialmente y ha entrado en servicio tras ser avistado en el puerto de Qingdao, China. El Beijing Maersk se convierte en una pieza clave dentro de la estrategia de descarbonización de la naviera danesa.
Diseño y tecnología del Beijing Maersk
Con una eslora de 350 metros y una manga de 56 metros, la embarcación tiene capacidad para transportar hasta 17.480 TEUs. Equipa un motor de combustible dual, lo que le permite operar con metanol como combustible alternativo, reduciendo significativamente las emisiones de CO2 frente al fuelóleo convencional.
El Beijing Maersk es el segundo de una serie de seis barcos construidos con estas especificaciones, uniéndose a otras unidades como el Berlin Maersk y el Ane Maersk. Esta clase de buques representa el compromiso de la compañía con su hoja de ruta hacia las cero emisiones netas.

El proyecto fue posible gracias a la colaboración con HD Hyundai Heavy Industries y la asociación técnica de Everllence. La entrega y puesta en marcha del buque se anunció mediante un comunicado oficial en redes sociales, incluyendo el hashtag corporativo #allthewaytozero.
La primera escala del Beijing Maersk en Qingdao no es casualidad: el puerto es uno de los más activos del mundo en tráfico de contenedores. Se espera que este buque opere en rutas de alta densidad comercial, optimizando la eficiencia del transporte transcontinental.
Fuente y fotos: Maersk