El pasado viernes, el precio del uranio alcanzó niveles cercanos a los máximos de los últimos 15 años después de que Kazatomprom, el mayor productor mundial, advirtiera que probablemente no cumplirá con sus objetivos de producción en los próximos dos años.
La compañía minera atribuyó estos problemas de producción principalmente a la escasez de ácido sulfúrico y a los retrasos en la construcción de nuevos yacimientos, factores que podrían persistir hasta 2025. Además, señaló que proporcionará una evaluación detallada de las posibles repercusiones en la producción en una actualización comercial programada para el 1 de febrero.
“A pesar de la búsqueda activa en curso de fuentes alternativas de suministro de ácido sulfúrico, las previsiones actuales indican que la empresa puede tener dificultades para alcanzar niveles de producción del 90% en comparación con los niveles contractuales de uso del subsuelo“, dijo Kazatomprom en el comunicado.
¿Cómo afecta la escasez de ácido sulfúrico al precio del uranio?
El ácido sulfúrico es ampliamente utilizado por los productores para extraer uranio de los minerales crudos debido a su eficacia y bajo costo. Kazatomprom advirtió que sus proyecciones para el próximo año podrían ser afectadas si persisten los problemas de suministro a lo largo de 2024 y si enfrenta dificultades para completar las obras de construcción programadas.
A lo largo de 2023, el precio al contado del uranio se ha más que duplicado, llegando actualmente a 97,45 dólares por libra, aunque aún está lejos de las cifras de tres dígitos alcanzadas en 2007 y de los niveles posteriores al desastre de Fukushima en Japón en 2011.
Este aumento de precios se produce en un contexto en el que 24 países, incluyendo Estados Unidos, Japón, Canadá, Gran Bretaña y Francia, se comprometieron el mes pasado en la COP28 en Dubai a triplicar la capacidad de energía nuclear para 2050. Aunque China, que no formó parte de esta promesa, continúa liderando la construcción global de centrales nucleares con planes para casi duplicar la capacidad hasta 100 gigavatios a finales de esta década, con 22 de las 58 centrales actualmente en construcción en todo el mundo.
Así mismo, la legislación reciente en Estados Unidos también podría tener un impacto en el precio del uranio, potencialmente antes que otros factores. Con el objetivo de reducir su dependencia de Rusia, que actualmente suministra más del 20% de su uranio, el Congreso aprobó un proyecto de ley en diciembre que requiere que Estados Unidos adquiera internamente una porción de su combustible nuclear.
Este proyecto de ley establece que para finales de 2027, 20 toneladas de HALEU (combustible de uranio poco enriquecido de alta pureza necesario para los reactores más avanzados del país) deben provenir de fuentes nacionales. Actualmente, está a la espera de la firma del Presidente Joe Biden.
Cabe destacar que Bank of America y Berenberg Bank indicaron esta semana en informes de investigación separados que la persistente escasez en el mercado del uranio podría llevar a que los precios superen los 100 dólares en los próximos días.
¡No te pierdas ninguna de nuestras publicaciones y síguenos en las redes sociales!
Inspenet.com YouTube LinkedIn Facebook Instagram
Fuente: worldenergytrade.com