Inspenet, 01 de julio 2023.
El destino del repunte del cobre es incierto, pero desde una perspectiva técnica, la acción del precio aún tiene que confirmar una tendencia alcista significativa.
El más reciente informe del Compromiso de Comerciantes de la LME (London Metal Exchange) expuso que los fondos mutuos de cobre han regresado a una nueva posición larga después de una breve posición corta neta a fines de mayo.
El precio de este elemento de incontables usos es un 17 % más bajo que los niveles de marzo de 2022. Éste es una materia prima imprescindible para los vehículos eléctricos que tienen como finalidad transformar la energía y eliminar las emisiones de carbono.
La narrativa alcista a largo plazo alimentada por la escasez de oferta proyectada sigue siendo una preocupación válida para los mercados. Sin embargo, las existencias de inventario de la LME continuaron con una tendencia alcista como lo han hecho desde enero.
¿Qué le espera al cobre hacia fin de año?
Las mejores expectativas para la economía estadounidense y las medidas de estímulo de China podrían comenzar a ver caer esos niveles. Mientras tanto, las importaciones de cobre en China aumentaron más del 9% mensual en mayo. Si esta tendencia sigue vigente, los mercados pueden comenzar a sentir la presión de la escasez de oferta una vez más.
A pesar de diez aumentos consecutivos, la Reserva Federal de EE.UU. (FED), decidió mantener las tasas de interés estables, pero proyectó aumentos adicionales para fines de año, lo que impactó el precio del cobre debido a su relación inversa con el índice del dólar estadounidense.
La subida actual de la Fed de +500 puntos básicos es la mayor desde que se elevó al 20% en 1980 y 1981 para combatir la inflación galopante.
Perú es el segundo productor de cobre a nivel mundial, pero de no contar con nuevos proyectos para este metal, esta posición en el ranking podría verse mermada y en consecuencia tendría un impacto económico para el país.
En general, las perspectivas para los precios del cobre hacia fines de año son inciertas. Es probable que las dos fuerzas macroeconómicas mencionadas anteriormente continúen jugando un tira y afloja sobre los precios. La dirección de los precios dependerá de qué fuerza sea más fuerte en un momento dado.