La empresa estatal Petróleos Mexicanos (Pemex) ha comenzado la explotación en el pozo exploratorio Puk, que se encuentra en el estado de Tabasco. Este pozo ha empezado a producir y generar más de 1,700 barriles de petróleo diarios registrados actualmente.
Las proyecciones de producción en pozo Puk
El pozo Puk ha mostrado un potencial, con 13 formaciones arenosas que podrían contener entre 8 y 15 millones de barriles de petróleo crudo equivalente. El plan de desarrollo para este campo incluye la perforación de aproximadamente cuatro pozos adicionales. Por ejemplo, su cercanía al campo Jep le otorga un valor estratégico, con una rentabilidad conjunta estimada en 18 millones de barriles de petróleo crudo equivalente.
Además, se encuentra ubicado en el municipio de Huimanguillo, el pozo terrestre Puk cuenta con recursos prospectivos de 11 millones de barriles de petróleo crudo equivalente. Se espera que el petróleo extraído sea ligero, con una densidad que varía entre 25 y 31 grados API. Y también, la probabilidad de éxito geológico se sitúa en el 27%.
El director general de Pemex, Octavio Romero Oropeza, ha mencionado la importancia del pozo Puk debido a su proximidad al campo Quesqui. Esta ubicación, junto con la cercanía a los pozos Jep y Chucox, facilitará una producción más eficiente y económica. También, Romero Oropeza resaltó que, aunque se trata de un yacimiento con reservas relativamente pequeñas, su conectividad con la infraestructura existente de Quesqui optimiza su rentabilidad y reduce los costos operativos.
El potencial petrolero de Tabasco
Con la proyección de perforar cuatro pozos adicionales, Pemex planea aumentar la producción en el área. La ubicación del pozo Puk en Huimanguillo, Tabasco, y sus recursos prospectivos de 11 millones de barriles de petróleo crudo. Además, el petróleo extraído, siendo ligero y con una probabilidad de éxito geológico del 27%, presenta una oportunidad lucrativa para la compañía.
Romero Oropeza ha subrayado la importancia estratégica de la proximidad del pozo Puk al campo Quesqui. Esta cercanía facilita una producción más eficiente y económica, mientras optimiza la rentabilidad al aprovechar la infraestructura existente de Quesqui, lo que reduce los costos operativos. A pesar de ser un yacimiento con reservas relativamente pequeñas, la conectividad con Quesqui y otros campos cercanos como Jep y Chucox fortalece la viabilidad económica del proyecto.
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Fuente: Oil and Gas Magazine
Foto: Pemex
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