La empresa de Petróleos Mexicanos (Pemex) ha informado que continúa el seguimiento y control detallado sobre el incidente ocurrido el pasado 10 de octubre en su refinería Deer Park, ubicada en Texas, en los Estados Unidos.
El Protocolo de Seguridad del incidente en la refinería Deer Park
El evento involucró una fuga de gas ácido sulfhídrico desde la Unidad Regeneradora de Aminas, y fue controlado de forma efectiva ese mismo día, mientras la planta fue declarada segura para retomar sus operaciones con normalidad.
Por otra parte, la liberación de gases ocurrió durante labores de mantenimiento en la unidad de proceso, y aunque duró solo unos minutos, las medidas de contención se activaron de inmediato. Además, el equipo de la refinería bloqueó la línea afectada y, en aproximadamente una hora, se redujeron las emisiones, logrando mitigar y detener la fuga completamente en un lapso de tres horas.
Para controlar la situación, Pemex utilizó tres quemadores diferentes que permitieron abatir la liberación de gases, y posteriormente, se reportó a las autoridades ambientales del estado de Texas a través del Sistema Electrónico de Reporte Ambiental (STEERS).
El monitoreo de la calidad del aire fue controlado y repetido muchas veces, durante el desarrollo del incidente. Esto ayudó a regular las mediciones en los alrededores de la refinería, las cuales no detectaron impactos de ácido sulfhídrico ni dióxido de azufre fuera de los posibles espacios afectados.
Actualmente, Pemex está trabajando en conjunto con agencias federales, estatales y locales para seguir de cerca las investigaciones que buscan determinar las causas exactas del incidente. La empresa reafirma su compromiso con la seguridad y la protección del medio ambiente, asegurando que se cumplieron todos los protocolos de seguridad industrial para minimizar cualquier riesgo.
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Fuente y foto: Pemex
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