Noland Arbaugh, se convirtió en el primer individuo en recibir el implante cerebral desarrollado por la compañía Neuralink, que dispone de capacidades telequinéticas y neurológicas avanzadas, bajo una operación segura e indolora a sus posibles portadores.
El éxito del primer implante cerebral
En una entrevista, Arbaugh expresó cómo su vida ha dado un giro drástico cambiado drásticamente gracias al implante, mencionando: “No tenía nada por que despertarme por la mañana y esto ha cambiado eso para mí”.
Antes del implante, Arbaugh dependía de pequeño un lápiz, sostenido fuertemente por su boca, para interactuar con su computador personal. Hoy, puede controlar su equipo, casi completamente con sus pensamientos, creando mejoras en su calidad de vida.
El implante Link posee con 1,024 electrodos distribuidos en 64 cables o “hilos” conectados a distintas áreas del cerebro responsables de las funciones motoras. Estos hilos, de aproximadamente 4 micrómetros de grosor y 20 mm de largo, son más finos que un cabello humano.
¿Cómo funciona el implante cerebral Link?
Dada la complejidad del procedimiento, se requiere una precisión absoluta para colocar el implante, y para ello, Neuralink ha desarrollado un robot especializado llamado R1, que implanta los hilos utilizando agujas apenas más grandes que un glóbulo rojo, minimizando así el daño al tejido cerebral.
La implementación del chip en Arbaugh se llevó a cabo sin complicaciones, y fue dado de alta al día siguiente, sin complicaciones ni efectos secundarios. En el transcurso de un mes, aprendió a controlar el cursor del mouse en su computadora a través de Bluetooth, usando solo sus pensamientos.
El implante es prácticamente invisible y se carga por inducción, con una batería que dura ocho horas, antes de necesitar una nueva carga. Para Arbaugh, le ha permitido disfrutar de múltiples juegos como Ajedrez, Mario Kart y más, agotando la batería tras horas y horas de uso, todo mediante telequinesis.
El fallo del primer implante
En el transcurso de los días, los hilos del implante de Arbaugh comenzaron a fallar al retirarse de su tejido cerebral, lo que provocó una “reducción de bits por segundo (BPS)“. Es decir, una disminución en la velocidad para controlar el computador con la mente. Neuralink no ha especificado cuántos hilos se han retraído, pero han mitigado los problemas de pérdida de datos mejorando el algoritmo del implante.
En su blog, Neuralink explicó: “En las semanas posteriores a la cirugía, varios hilos se retrajeron del cerebro, resultando en una disminución neta en la cantidad de electrodos efectivos. Esto condujo a una reducción en BPS. En respuesta, modificamos el algoritmo de grabación para que fuera más sensible a las señales neuronales, mejoramos las técnicas de traducción de estas señales en movimientos del cursor y optimizamos la interfaz de usuario. Estas mejoras resultaron en una rápida y sostenida mejora en BPS, superando el rendimiento inicial de Noland“.
La búsqueda de nuevos portadores humanos
Ahora, Elon Musk busca un segundo paciente humano para continuar con los ensayos clínicos. Los candidatos deben ser tetrapléjicos o padecer ELA, y pueden registrarse en el sitio web oficial. El equipo de Neuralink tienen la esperanza de que futuras interacciones y avances en el hardware, permitan la restauración motriz en personas con daño en la médula espinal.
Algunos expertos de la empresa, indican que los hilos podrían haberse retraído debido a una condición llamada neumocéfalo, donde el aire queda atrapado dentro del cráneo tras la cirugía, lo que ocasiona la desconexión de algunos hilos.
Neuralink contempló la posibilidad de retirar el implante por completo antes de realizar los ajustes en la sensibilidad de los electrodos y lograr una mayor BPS. No obstante, Arbaugh se siente optimista y agradecido, sin preocupaciones de seguridad para su salud y bienestar, a pesar de que algunos hilos permanecen desplazados.
El futuro de la tecnología de asistencia. Fuente: Neuralink
A pesar de los avances, Neuralink no ha quedado exenta de controversias. Algunos informes registran la muerte de más de una docena de monos, durante las pruebas iniciales del chip en desarrollo. Musk brindó algunas declaraciones y sostuvo que solo se probaron en monos con “enfermedades terminales”, aunque empleados de la empresa han contradicho estas afirmaciones.
No obstante, la FDA supervisa y regula los avances del chip de la empresa, autorizando las pruebas en humanos, aumentando las pequeñas posibilidades para los tetrapléjicos… o tal vez, brindando un gran salto de fe, para los próximos años.
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Fuente y foto: Neuralink
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