Inspenet, 18 de septiembre 2023.
El gigante naviero Maersk realizó la ceremonia de bautismo el jueves para el primer barco del mundo impulsado por metanol verde, marcando un hito en su estrategia de alejarse gradualmente del uso de diésel y descarbonizar el transporte marítimo.
En Copenhague, la compañía presentó el “Laura Maersk”, un modelo de tamaño relativamente pequeño capaz de transportar alrededor de 2.136 contenedores (TEU) y que comenzará a operar en octubre.
Este barco, construido en Corea del Sur por Hyundai Heavy Industries (HHI) y equipado con un motor de combustible dual, logrará un ahorro de 100 toneladas de CO2 al día en comparación con un barco similar propulsado por diésel.
“El metanol verde es nuestro combustible preferido porque es la única solución capaz de cumplir los requisitos de la neutralidad de carbono”, afirmó el director general de la empresa, Vincent Clerc, que inauguró el buque junto a la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen.
El metanol verde, también llamado “e-metanol”, se genera mediante la combinación de dióxido de carbono (CO2) e hidrógeno verde, producido mediante la electrólisis del agua con electricidad generada a partir de fuentes de energía renovable.
De acuerdo con el Instituto Superior de Economía Marítima francés (ISEMAR), el transporte marítimo a nivel global tiene un impacto ambiental mayor que el transporte aéreo, contribuyendo con un 2,89% de las emisiones totales de gases de efecto invernadero, según datos recientes de la Organización Marítima Internacional (OMI).
En busca del uso del metanol
A principios de 2022, la compañía naviera danesa presentó un ambicioso plan estratégico con el objetivo de reducir gradualmente la dependencia del diésel y cumplir con las metas de reducción de emisiones de gases de efecto invernadero establecidas por la Unión Europea en el marco del Acuerdo de París.
Además, la naviera realizó inversiones en la producción del mencionado combustible debido a la escasez de oferta en el mercado y lanzó un importante proyecto en España a finales de 2022.
Con el respaldo del gobierno español y la colaboración de socios del sector privado, el proyecto tenía como objetivo movilizar una inversión de alrededor de 10.000 millones de euros (equivalentes a unos 10.660 millones de dólares al tipo de cambio actual) para establecer dos grandes centros de producción de metanol verde, uno ubicado en Andalucía y otro en Galicia.
Cabe destacar que la naviera se ha propuesto la meta de producir dos millones de toneladas de metanol verde al año para el año 2030, cantidad suficiente para descarbonizar aproximadamente el 10% de su flota de buques. Así mismo, planea implementar esta producción internamente a través de cinco o seis plantas distribuidas en distintas ubicaciones alrededor del mundo.