Inspenet, 02 de julio 2023.
La Minería marina amenaza a la biodiversidad del mar en México. El parque nacional Revillagigedo en el mar mexicano es el área marina protegida (AMP) más grande de América del Norte y fue creado en 2017 para proteger su ecosistema único, el cual alberga una variedad de especies, incluidos tiburones, mantarrayas, delfines y ballenas jorobadas.
Un estudio reciente encontró que la creación del AMP no impactó negativamente la pesca en el área. De hecho, el estudio encontró que la captura promedio de peces en realidad aumentó un 4% después de su creación. Esto sugiere que el AMP pudo proteger el ecosistema sin dañar la industria pesquera.
Sin embargo, este podría enfrentar otra amenaza debido a que en la Zona de Fractura Clarión-Clipperton, un área de alta biodiversidad ubicada a cientos de kilómetros al noroeste del parque nacional, alberga nódulos del fondo marino que son ricos en minerales como cobalto, níquel y manganeso. Estos minerales tienen una gran demanda para su uso en la industria tecnológica.
Alto riesgo de que la minería marina tenga un impacto negativo
La Autoridad Internacional de los Fondos Marinos (ISA), encargada de regular la exploración y explotación de minerales en los fondos marinos, ha adjudicado 12 contratos de exploración en la Zona de Fractura Clarión-Clipperton.
Sin embargo, un estudio reciente encontró que el 92% de las especies que habitan el área son desconocidas para la ciencia. Esto significa que existe un alto riesgo de que la minería marina pueda tener un impacto negativo significativo en el ecosistema.
Una de las principales preocupaciones es que la minería marina podría generar penachos de sedimentos suspendidos en el agua. Estas columnas podrían viajar al Revillagigedo y otras áreas cercanas, lo que podría dañar la vida marina e interrumpir la cadena alimentaria. Además, los productos químicos utilizados en esta actividad también podrían contaminar el agua y dañar el medio ambiente.
Para proteger el Revillagigedo y otros ecosistemas marinos se deben establecer regulaciones estrictas. Estas deberían prohibir la minería en áreas de alta biodiversidad y exigir a las empresas que realicen evaluaciones de impacto ambiental exhaustivas antes de comenzar las operaciones.
La minería marina, al impactar en los procesos naturales de almacenamiento de carbono, puede llegar a acelerar el cambio climático. Las máquinas podrían liberar el carbono almacenado en los sedimentos de las profundidades.