Un equipo del Departamento de Ingeniería Química y Biomolecular de la Universidad de Corea han presentado el desarrollo de baterías de metal de litio, con una tecnología de recubrimiento basada en iones de plata que mejora la estabilidad y vida útil de los electrodos.
La seguridad de las baterías de litio
La iniciativa, liderada por el profesor Jinhan Cho, emplea un método capa por capa mediante enlaces de coordinación para depositar iones de plata y ácido tritiocianúrico (TCA) sobre un electrodo de níquel fibroso. El resultado es una estructura metalorgánica (MOF) ultradelgada, de menos de 40 nanómetros, que opera sin necesidad de calor ni síntesis de nanopartículas.
Durante el funcionamiento de la batería, los iones de plata se convierten en nanopartículas que regulan la acumulación de litio y suprimen la formación de dendritas. Al mismo tiempo, el TCA forma una película protectora que reduce el deterioro del electrodo con el uso prolongado de la tecnología.
Las pruebas revelaron que los nuevos ánodos permiten que las baterías funcionen de forma estable por más de 2000 horas. Incluso en configuraciones con ánodos convencionales, se mantuvo más del 96 % de la capacidad original después de 1300 ciclos de carga y descarga, como técnica de medición.
Es un descubrimiento que podría impulsar la comercialización de baterías de alta densidad energética, manteniendo la eficiencia en condiciones similares a las de aplicaciones comerciales. La innovación tecnológica resalta por lograrlo sin depender de procesos industriales complejos, lo que podría facilitar la accesibilidad a gran escala en el mercado actual.
El profesor Cho demuestra que esta tecnología basada únicamente en iones de plata podría extenderse a baterías de otros metales, como sodio o zinc. También su desarrollo fue financiado por la Fundación Nacional de Investigación de Corea y sus resultados fueron publicados en la revista Advanced Materials, siendo seleccionados como artículo de portada por su relevancia en el campo del almacenamiento de energía.
Fuente y foto: Korea University