La localidad finlandesa de Pornainen acaba de poner en funcionamiento el sistema de almacenamiento térmico con arena más grande del planeta. Se trata de una batería de arena desarrollada por Polar Night Energy, que ya opera como fuente principal de calefacción para la red urbana de Loviisan Lämpö.
La batería de arena más grande del mundo
Gracias a este sistema, Finlandia da un paso clave en su transición hacia una energía más limpia. La batería de arena tiene una potencia de 1 megavatio y una capacidad de almacenamiento de 100 megavatios-hora.
Estos números no solo duplican en escala los proyectos anteriores, sino que permiten reducir las emisiones de CO₂ del sistema de calefacción de la ciudad en casi un 70%, equivalentes a 160 toneladas anuales.
Esta batería reduce 70% emisiones de CO₂. Fuente: Polar Night Energy
El dispositivo funciona almacenando electricidad procedente de fuentes renovables en forma de calor dentro de unas 2.000 toneladas de esteatita reciclada. Esta piedra triturada, subproducto del fabricante finlandés Tulikivi, se calienta hasta alcanzar temperaturas elevadas que luego se aprovechan para abastecer la demanda térmica de edificios residenciales, municipales y educativos.
Durante el verano, puede sostener la red por casi un mes. En invierno, cubre una semana completa. Su integración permite, además, eliminar totalmente el uso de petróleo y reducir el consumo de biomasa en un 60%, manteniendo la caldera existente como respaldo.
Inteligencia artificial y economía circular
La operación y carga de la batería se optimiza gracias a una solución de inteligencia artificial desarrollada por la empresa Elisa, que identifica automáticamente los momentos de menor coste eléctrico. Esto además de estabilizar la red eléctrica en colaboración con Fingrid, convierte a la batería en una fuente de ingresos y ahorro para Loviisan Lämpö.
La implementación del sistema recibió respaldo de Business Finland como parte del impulso a tecnologías limpias. A nivel técnico, participaron más de 100 trabajadores y 40 subcontratistas bajo la dirección de Polar Night Energy, que ya prepara nuevos desarrollos para escalar esta tecnología a procesos industriales y nuevos territorios.
Una apuesta por la sostenibilidad
La batería no es solo un componente técnico: representa una apuesta concreta por la economía circular y la integración de sectores eléctricos y térmicos. CapMan Infra, fondo propietario de Loviisan Lämpö, ve en este sistema una inversión estratégica por su potencial para sustituir combustibles fósiles, participar en mercados energéticos y adaptarse a distintas industrias.
Desde la perspectiva del municipio, el proyecto también se alinea con los objetivos climáticos. Edificios clave de Pornainen ya se benefician del nuevo sistema, y se espera que la experiencia sirva de ejemplo replicable para otras regiones con climas fríos y redes de calor urbano.
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Fuente y foto: Polar Night Energy