La startup alemana Biophelion está redefiniendo el aprovechamiento de residuos industriales mediante un hongo negro con habilidades bioquímicas sorprendentes. Derivada del instituto Leibniz-HKI y con sede en Jena, la empresa transforma subproductos de la producción de bioetanol, papel y azúcar en materiales de alto valor comercial.
El hongo que transforma los residuos industriales
El microorganismo protagonista, similar a una levadura negra, metaboliza mezclas complejas de carbono y produce tres compuestos clave: un poliéster para aplicaciones de envase, el biopolímero comestible pululano y un tensioactivo inédito cuyas propiedades están siendo estudiadas.
El proceso evita la emisión de CO2, cerrando el ciclo del carbono y reduciendo la carga ambiental.
El proyecto surgió en el marco del «Circular Biomanufacturing Challenge» de SPRIND, agencia alemana dedicada a innovaciones de alto riesgo. Durante la segunda fase del programa, Biophelion consolidó su estructura como spin-off en colaboración con la RWTH de Aquisgrán. El equipo directivo, formado por Lars Regestein y Till Tiso, mantiene vínculos activos con el Leibniz-HKI para seguir perfeccionando los bioprocesos.
Pululano para impresión 3D
El pululano, ya utilizado en alimentos, podría sustituir plásticos derivados del petróleo en impresión 3D. Biophelion incluso proyecta el diseño de biorreactores impresos con este material, capaces de producir sus propios contenedores de cultivo.
En paralelo, los tensioactivos desarrollados ofrecen una alternativa ecológica a los compuestos convencionales usados en detergentes, con menor impacto en aguas residuales.
Fuente y foto: Leibniz-HKI