La extracción de arena amenaza el mayor lago del sudeste asiático

El lago Tonlé Sap está perdiendo su pulso hídrico vital debido a la minería intensiva en el río Mekong.
Lago Tonlé Sap

Durante décadas, el lago Tonlé Sap en Camboya ha sido un pilar ecológico y humano en el sudeste asiático, sin embargo, un nuevo estudio publicado en Nature Sustainability y liderado por investigadores de la Universidad de Loughborough advierte que la creciente extracción de arena en el río Mekong está comprometiendo el flujo que alimenta al lago y amenaza con desencadenar una crisis ambiental de gran escala.

El equilibrio hídrico del lago, en declive

El lago Tonlé Sap es el lago de agua dulce más grande del sudeste asiático, una Reserva de la Biosfera de la UNESCO y un ecosistema extremadamente productivo y biodiverso, que depende de un fenómeno único llamado flujo inverso. Este fenómeno ocurre en la temporada de monzones y se produce porque el río Mekong lleva tanta agua que esta empuja y hace que el río Tonlé Sap fluya hacia atrás, llenando el lago y expandiéndose enormemente.

Esta inversión estacional crea un hábitat ideal para la reproducción de peces y nutre la biodiversidad, a la vez que es la base de la pesca y la agricultura de la región. Sin embargo, el estudio revelo que entre 1998 y 2018 el volumen de ese flujo inverso se ha reducido entre un 40 % y un 50 %, producto del descenso del lecho del Mekong, el cual está vinculado directamente a la intensificación de la extracción de arena y a la acumulación de sedimentos retenidos por represas.

El rol de la extracción de arena

La extracción de arena ha crecido aceleradamente en la región, ya que es fundamental para la industria de la construcción y se calcula que en la actualidad se extraen más de 100 millones de toneladas anuales del lecho del Mekong. Este saqueo fluvial ha alterado la morfología del río, reduciendo su capacidad de ejercer presión sobre el lago durante el monzón y, por tanto, debilitando el flujo inverso.

Proyecciones del estudio indican que para 2038, si continúa la tendencia, el flujo podría caer hasta un 69 % respecto a 1998, lo que pondría al sistema en riesgo de colapso.

¿Cuáles son las consecuencias directas?

Esta reducción del flujo hacia el lago tiene dos efectos graves y paradójicos en el delta del Mekong, donde viven 23 millones de personas:

  • Mayor riesgo de inundaciones en la estación húmeda: Al no poder entrar tanta agua en el lago, ese volumen extra (unos 26 km³) se queda en el cauce principal del Mekong, aumentando el caudal y el riesgo de desbordamientos e inundaciones aguas abajo.
  • Mayor riesgo de sequía e intrusión salina en la estación seca: El lago devuelve un 59% menos de agua al delta durante la estación seca. Esto significa:
    • Menos agua para la agricultura.
    • Permite que el agua de mar penetre más tierra adentro en el delta (intrusión salina), arruinando cultivos y acuíferos de agua dulce.

Investigación y soluciones en curso

Para profundizar en las consecuencias de esta práctica, las universidades de Loughborough y Newcastle están creando nuevos proyectos enfocados en analizar cómo la extracción de arena afecta los cauces fluviales y aumenta el riesgo de inundaciones. Estas iniciativas buscan aportar conocimiento para una gestión más sostenible del sedimento en la región.

El lago Tonlé Sap es de vital importancia para los ecosistemas y las comunidades de Camboya. En los últimos años, las comunidades locales han notado que el lago no se llena tanto como antes y que los ecosistemas que dependen de temporadas de inundaciones prolongadas están sufriendo una presión cada vez mayor. Si se quiere preservar el ecosistema del lago Tonlé Sap, es necesario centrarse en mantener o aumentar el nivel del lecho del río Mekong.

Dr. Chris Hackney, profesor titular de Geografía Física en la Universidad de Newcastle.

Fuente: Universidad de Loughborough