Italia, Austria y Alemania han dado un paso significativo para la importación de hidrógeno desde el norte de África. El pasado 30 de mayo, estos tres países firmaron una declaración de intenciones para la construcción del Corredor Sur del Hidrógeno (SouthH2 Corridor), un proyecto que ya forma parte de la lista de Proyectos de Interés Común de la Unión Europea. Este ambicioso proyecto pretende conectar ambas orillas del Mediterráneo mediante un oleoducto de 3.300 Km.
El Corredor Sur del Hidrógeno conectará África y Europa
Para llevar a cabo este plan, se ha decidido establecer un grupo de trabajo trilateral. Esta unidad tendrá la tarea de ajustar el proyecto a las necesidades específicas de los principales centros de demanda de hidrógeno. Incluirá a actores clave como operadores de sistemas de transmisión, reguladores nacionales, instituciones financieras y posibles consumidores y productores de hidrógeno, garantizando una colaboración integral y efectiva.
En teoría, este corredor permitirá la importación de hidrógeno renovable desde Túnez y Argelia, contribuyendo a los objetivos comunitarios establecidos por Bruselas de alcanzar 10 millones de toneladas para finales de la década, además de otros 10 millones de toneladas de producción interna.
Con una capacidad nominal de 4 millones de toneladas anuales, el Corredor Sur del Hidrógeno representará el 40% de la meta de la UE. Este enlace conectará el norte de África con Europa, similar a otro corredor planeado que pasará por la Península Ibérica y Francia.
Argelia firma acuerdos clave con Berlín
La producción actual de hidrógeno renovable en Túnez y Argelia es prácticamente inexistente. El mes pasado, Argelia firmó un acuerdo con Berlín para dos proyectos piloto de hidrógeno verde de 50 MW. Además, Eni está desarrollando un proyecto piloto en el campo Bir Rebaa North, donde se encuentra una planta fotovoltaica de 10 MW.
El Corredor Sur del Hidrógeno será un gasoducto “listo para el hidrógeno”, apto para transportar una mezcla de hidrógeno con un 10-20% de gas fósil. Paralelamente, Argelia ha iniciado las primeras subastas para la construcción de 3 GW de energía fotovoltaica hasta 2026, dentro de su plan nacional para alcanzar 15 GW de energía solar para 2035.
Un aspecto interesante de este proyecto es su potencial para fomentar la cooperación internacional en el ámbito de la energía renovable, no solo entre Europa y África, sino también dentro de la Unión Europea. Este tipo de iniciativas podría servir de modelo para futuros proyectos de infraestructura energética sostenible a nivel global, fortaleciendo la transición hacia fuentes de energía más limpias y seguras.
¡Síguenos en las redes sociales y no te pierdas ninguna de nuestras publicaciones!
YouTube LinkedIn Facebook Instagram X
Fuente: sustainabilityenvironment
Foto: Shutterstock