Con la aprobación formal del Departamento de Petróleo, Gas y Minería de Utah (DOGM), Anfield Energy está lista para iniciar la fase de construcción de su mina Velvet-Wood, ubicada en el estado de Utah. Esta luz verde regulatoria se suma al permiso ambiental previamente otorgado por el Departamento del Interior de Estados Unidos, posicionando a la compañía para avanzar de manera decisiva hacia la producción.
La mina Velvet-Wood y el suministro de combustible nuclear
El proyecto Velvet-Wood, que contiene uranio y vanadio, se perfila como un componente estratégico para apoyar la creciente demanda de combustible nuclear en el país. Anfield Energy planea depositar el bono de garantía de recuperación en la Oficina de Administración de Tierras (BLM), cumpliendo con los requisitos para comenzar la construcción formal del sitio.
Velvet-Wood tiene una historia de explotación que data de la década de 1980, cuando se extrajeron aproximadamente cuatro millones de libras de U3O8 y cinco millones de libras de V2O5. Actualmente, el yacimiento cuenta con recursos medidos e indicados por 4,6 millones de libras de eU3O8, con una ley promedio de 0,29 %, y un recurso inferido adicional de 552.000 libras.
La planta de procesamiento Shootaring Canyon, propiedad también de Anfield, jugará un rol central en la etapa de producción. Ubicada dentro de una de las zonas históricamente más productivas en el país, esta instalación es una de las tres únicas plantas de uranio convencional licenciadas actualmente en Estados Unidos.
Con un consumo de uranio que supera los 22 millones de kilos anuales y una producción interna inferior al 1 %, Estados Unidos busca fortalecer su autosuficiencia en combustible nuclear. En ese contexto, los activos nacionales de Anfield adquieren una relevancia particular. El impulso regulatorio y político en favor de la energía nuclear durante 2025 ha creado condiciones favorables para proyectos como Velvet-Wood.
El Plan de Operaciones presentado por Anfield ante las autoridades estatales y federales incluye controles técnicos, medidas de recuperación ambiental y garantías financieras alineadas con los estándares regulatorios. Esto refuerza la posición de la compañía como un actor responsable en el sector de la minería nuclear.
Fuente y foto: Anfield Energy
