Ubicado a 45 kilómetros de la isla de Borkum, Alpha Ventus fue pionero en la energía eólica offshore en Alemania. Ahora, este referente del sector se convierte en el primer caso del país en afrontar el reto de su desmantelamiento con criterios ambientales y de investigación científica.
Desmantelamiento del parque eólico marino con enfoque ambiental
El consorcio operador, compuesto por EWE, RWE y Vattenfall a través de DOTI, ha anunciado el desarrollo de un concepto de desmantelamiento sostenible. La colaboración estrecha con la Agencia Federal Marítima e Hidrográfica busca priorizar la protección del ecosistema marino y el reciclaje de componentes como parte central del plan.
La iniciativa RAVE, vinculada al Instituto Fraunhofer IWES, desempeña un papel clave en el proceso. Su enfoque se orienta al análisis técnico y económico del desmantelamiento, generando información que podrá aplicarse a futuros proyectos offshore. Se estudiará desde la gestión logística hasta la reserva de buques especializados y la capacidad portuaria.
Repotenciación descartada: limitaciones estructurales
Aunque se consideró la opción de renovar las turbinas, las condiciones del sitio y los requerimientos de los nuevos modelos hicieron inviable esa posibilidad. Reemplazar los cimientos implicaría una reconstrucción completa, lo que ha llevado al consorcio a centrar sus esfuerzos en una retirada planificada.
Con su cierre programado en cuatro años, Alpha Ventus se mantiene como plataforma de aprendizaje. El proceso actual sienta un precedente para el sector eólico europeo, que comienza a enfrentar el fin del ciclo de vida de sus primeras instalaciones. Este ejemplo de transición estructurada podrá influir en futuras normativas y modelos de gestión sostenible del desmantelamiento.
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Fuente: Alpha Ventus
Foto: Shutterstock
