Es cierto, para niveles bajos de radiación y por debajo de un valor umbral donde hay conocimiento de los efectos a ocurrir, no hay una consecuencia fija o determinada en el organismo de la persona, sin embargo lo que si se conoce es que a medida que se aumenta el nivel de radiación en este rango de bajas niveles de radiación, aumenta también la probabilidad de desarrollar algún tipo de patología en la salud del individuo expuesto, como por ejemplo: Inducción de cancer (carcinogénesis), malformaciones en organos de niños cuando las madres han recibido radiación en las etapas iniciales de gestación (organogénesis), y malformaciones en la descendencia de padres que han sido expuestos radiación (mutagénesis). Es por ello que, aunque que se esté expuesto a bajos niveles de radiación, se deben tomar las previsiones necesarias para minimizar la cantidad de radiación a recibir. Para ello se debe tener en cuenta y aplicar los siguientes parámetros:
1. Tiempo: Mientras menor sea el tiempo de exposición, menor la cantidad de radiación a recibir.
2. Distancia: A mayor distancia de la fuente de radiación, menor la cantidad de radiación a recibir.
3. Blindaje: Mientras se pueda interponer o aprovechar una barrera de material solido entre la fuente y la persona, menor la cantidad de radiación a recibir.
Aparte de lo anterior se debe cumplir con las normativas aplicable por la exposición a las radiaciones ionizantes.