Controlar la corrosión implica inspecciones, análisis de riesgos y selección de materiales, integrando métodos convencionales con tecnologías innovadoras para predicción.
Las redes de sensores ultrasónicos monitorean la corrosión en tiempo real, detectan fallas y reducen costos operativos, aumentando la seguridad industrial.
Identifica problemas como la interferencia eléctrica y la alta resistividad del suelo en sistemas de protección catódica.
El diseño del sistema depende del recubrimiento, resistividad del suelo y tipo de estructura a proteger.
El SCC compromete estructuras metálicas al combinar esfuerzos mecánicos y corrosión, exigiendo control ambiental y selección adecuada de materiales.
La corrosión marina se intensifica por condiciones ambientales que alteran el comportamiento electroquímico de los materiales metálicos.
Las juntas aislantes son esenciales para mantener la separación eléctrica y prevenir interferencias en sistemas de protección catódica.
En la constante batalla contra la degradación estructural inducida por la corrosión externa, particularmente en infraestructuras que operan en áreas de acceso restringido donde las inspecciones se son difíciles de realizar, la norma NACE SP0169 sobre «Control de la corrosión externa en sistemas de tuberías metálicas subterráneas o sumergidas».
La selección precisa de materiales y un diseño estructural cuidadoso permiten anticipar y mitigar la corrosión, garantizando estructuras metálicas resistentes y duraderas.
Controlar la corrosión con tecnologías avanzadas ayuda a prevenir fallos estructurales, reducir costos y mejorar la eficiencia en la producción.
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