Gestión de operaciones y mantenimiento en redes de tuberías midstream

En redes midstream, las operaciones y mantenimiento aseguran la disponibilidad, reducción de riesgos y apego a normas internacionales.
Gestión de operaciones y mantenimiento en redes de tuberías midstream

Las redes de tuberías midstream son fundamentales para el transporte de hidrocarburos y gases en la cadena de valor energético. Estas infraestructuras permiten movilizar grandes volúmenes de productos de manera continua, segura y eficiente, conectando centros de producción con instalaciones de refinación, procesamiento y distribución

Sin embargo, su operación demanda un riguroso enfoque en gestión de operaciones y mantenimiento, ya que cualquier falla impacta no solo en la continuidad del suministro, sino también en la seguridad de las comunidades y en la sostenibilidad ambiental. La gestión de operaciones y mantenimiento en redes de tuberías  midstream integra disciplinas de ingeniería, confiabilidad, gestión de activos e integridad mecánica. Su propósito es maximizar la disponibilidad, reducir riesgos y garantizar el cumplimiento de estándares internacionales

Este artículo está dirigido a ingenieros y técnicos especializados en integridad mecánica e inspección de tuberías, con el propósito de brindar una visión técnica, profesional y actualizada sobre los principales retos y lineamientos que orientan a la industria.

Gestión de activos y confiabilidad en redes midstream

La gestión de activos en redes midstream se centra en administrar de forma integral el ciclo de vida de la infraestructura de poliductos. Esto implica planificar, operar, mantener y eventualmente reemplazar equipos de manera que se optimice la disponibilidad y se minimicen los costos asociados al riesgo. Como por ejemplo la inspección para verificar el estado operativa de una línea de conducción hacia una planta petroquímica e infraestructura en zona de transporte energético de complejidad del sistema industrial.

Inspeccionando el estado de las tuberías midstream para el transporte de crudo.
Inspección de la integridad de las tuberías para el transporte de crudo.

Uno de los pilares es la Confiabilidad Operacional, que permite priorizar actividades de mantenimiento según la criticidad de cada tramo de tubería. Por ejemplo, un oleoducto expuesto a condiciones geotécnicas inestables recibirá mayor atención preventiva que uno en terreno estable.

La digitalización ha transformado esta gestión mediante el uso de gemelos digitales, sistemas SCADA y plataformas de Asset Performance Management (APM). Estas herramientas permiten modelar escenarios de deterioro, predecir fallas y optimizar recursos para extender la vida útil de los activos.

Riesgos operativos y planes de respuesta en tuberías

La operación de poliductos está expuesta a riesgos significativos que deben ser gestionados de forma sistemática. Entre los principales se encuentran:

  • Corrosión interna y externa.
  • Daños por terceros. – Fugas y rupturas.
  • Amenazas geotécnicas (movimientos de tierra, inundaciones, sismos).

Tabla 1. Estrategias de mitigación de riesgos

Riesgo identificadoEstrategia de mitigación
Corrosión internaInhibidores químicos, pigging de limpieza
Corrosión externaProtección catódica, recubrimientos avanzados
Daño por tercerosMonitoreo de terceros, señalización, patrullaje aéreo
Amenazas geotécnicasMonitoreo geotécnico, sistemas de alerta temprana
Fugas/RupturasVálvulas de seccionamiento, planes de respuesta de emergencia

El análisis de riesgo en tuberías se realiza con metodologías como el Quantitative Risk Assessment (QRA) (Evaluación cuantitativa de riesgos), que combina probabilidad y consecuencias para establecer prioridades. Por lo cual es necesario diseñar estrategias de mitigación como recubrimientos avanzados, protección catódica, válvulas de seccionamiento automatizadas y monitoreo continuo mediante fibra óptica o sensores.

En cuanto a planes de respuesta, es esencial la coordinación con autoridades locales, brigadas de emergencia y comunidades cercanas. Los protocolos deben incluir: simulacros planificaos, rutas de evacuación, aislamiento de secciones críticas y comunicación inmediata a entes reguladores.

Métricas de rendimiento críticas para evaluar la integridad

La integridad de los poliductos no puede evaluarse sin indicadores cuantificables que permitan medir desempeño y riesgos. Algunas de las métricas más relevantes son:

  • Disponibilidad operacional (% de tiempo de actividad del sistema).
  • Mean Time Between Failures (MTBF): tiempo medio entre fallas.
  • Mean Time To Repair (MTTR): tiempo medio de reparación.
  • Tasa de corrosión (pérdida de espesor en mm/año).
  • Número de incidentes reportables (según normativas como PHMSA o API 1160).

Tabla 2. Clasificación de riesgos en tuberías midstream

Categoría de riesgoProbabilidadConsecuenciaNivel de riesgo
Corrosión internaAltaMediaAlto
Corrosión externaMediaAltaAlto
Daño por tercerosMediaAltaCrítico
Amenazas geotécnicasBaja-MediaMuy altaCrítico
Fugas/RupturasBajaMuy altaCrítico

El seguimiento de estos indicadores no solo fortalece la confiabilidad, sino que también permite justificar ante inversionistas y entes reguladores la efectividad de los programas de integridad.

Integración de prácticas ESG en el sector midstream

El sector midstream, tradicionalmente enfocado en transporte de hidrocarburos, enfrenta ahora el desafío de integrar criterios ambientales, sociales y de gobernanza (ESG) en sus operaciones.

  • Ambiental: reducción de emisiones fugitivas de metano y compuestos orgánicos volátiles (VOCs), implementación de tecnologías de detección temprana y proyectos de eficiencia energética.
  • Social: programas de responsabilidad social con comunidades locales, creación de empleo y planes de capacitación.
  • Alta dirección: cumplimiento estricto de regulaciones, auditorías externas y reportes transparentes de desempeño.

La integración ESG no es solo una obligación regulatoria, sino también un diferenciador competitivo que mejora la aceptación social de proyectos y facilita acceso a financiamiento sostenible.

Establecimiento de un Sistema de Gestión de la Seguridad (SGS)

Un SGS es una herramienta estructurada que ha demostrado ser eficaz en numerosos casos para reducir los errores humanos, crear una cultura de seguridad en todos los niveles de la organización y disminuir la probabilidad de accidentes marítimos. Los objetivos de un SGS son proporcionar prácticas de trabajo seguras para las operaciónes y mantenimiento de redes de tuberías, evaluar e identificar continuamente los riesgos para el oleoducto, el personal y el medio ambiente, establecer las medidas de protección adecuadas para dichos riesgos y mejorar las habilidades de gestión de la seguridad del personal a cargo de las operaciones y el mantenimiento.

Principales normas API aplicables a tuberías midstream

La gestión de operaciones y mantenimiento en ductos se rige por normas internacionales, entre las cuales destacan:

  • API 1160: Gestión de integridad de oleoductos.
    • El API 1160 es una práctica recomendada, la cual es aplicable a los sistemas de tuberías que se utilizan para transportar «líquidos peligrosos» como se define en el Título 49 del CFR de los EE.UU., Parte 195.2.
    • El uso de esta práctica recomendada, no se limita a las tuberías reguladas por 49 CFR 195, y los principios incorporados en la gestión de integridad son aplicables a todos los sistemas de tuberías.
  • API 1104: Requisitos de soldadura en tuberías y equipos asociados.
  • API RP 1110: Presión de operación segura en oleoductos.
  • API 579 / ASME FFS-1: Evaluación de aptitud para el servicio (Fitness-for-Service).

Estas normas se complementan con regulaciones locales, como las emitidas por la PHMSA en EE. UU. o las normativas de transporte de gas y petróleo en América Latina. Su cumplimiento es indispensable para asegurar la integridad y la sostenibilidad de los activos.

Enfoque de API 1173 en operaciones y mantenimiento

La norma API 1173 (Pipeline Safety Management System, PSMS) es fundamental  para especialistas en operaciones y mantenimiento de oleoductos y gasoductos, ya que establece un marco estructurado para gestionar la seguridad, optimizar procesos y minimizar riesgos operacionales. Desarrollado por el Instituto Americano del Petróleo (API), es un marco para el Sistema de Gestión de Seguridad de Oleoductos (PSMS). Fue creado en colaboración con la Junta Nacional de Seguridad del Transporte (NTSB) y otras partes interesadas de la industria. El objetivo es mejorar la seguridad, reducir los riesgos y fomentar la mejora continua en las operaciones de oleoductos.

API 1173 provee una estructura basada en la mejora continua, la gestión de riesgos y la documentación de procesos para todas las fases de la operación de ductos. 

  • La norma es adaptativa y aplicable tanto a empresas pequeñas como a grandes corporativos. 
  • Promueve la integración de liderazgo, cultura organizacional, gestión de cambios, y desarrollo de competencias técnicas en el personal encargado de operaciones y mantenimiento. 
  • El ciclo de gestión se basa en el modelo Plan-Do-Check-Act: planificar, ejecutar controles y entrenamientos, revisar incidentes y corregir continuamente los procesos. 

Esta norma ofrece un sistema de gestión de seguridad voluntario y adaptable para operadores de tuberías de todos los tamaños. Abarca el diseño, la instalación, la operación, el mantenimiento y la integridad de las tuberías. Si bien no es un requisito legal, es ampliamente recomendado por líderes de la industria y organismos reguladores. Su cumplimiento puede ayudar a prevenir accidentes, reducir riesgos y proteger tanto a la población como al medio ambiente.

Competencias del especialista y aplicación práctica

Un especialista debe dominar:

  • Identificación, evaluación y mitigación de riesgos asociados a la operación y mantenimiento de ductos. 
  • Implementación de programas de capacitación alineados con API 1173 para garantizar que todo el personal esté calificado y actualizado en procedimientos seguros y emergencias. 
  • Uso de evaluaciones internas, auditorías y análisis de brechas (gap análisis) para mejorar el nivel del sistema de gestión, ajustando procedimientos y prácticas operacionales a los requerimientos de la norma. 
  • Documentación y control de registros operativos, tanto en procedimientos como en incidentes, para facilitar auditorías y revisiones regulatorias. 
  • Gestión efectiva de cambios: asegurando que cualquier modificación técnica, operativa o administrativa sea planificada, evaluada y aceptada bajo el marco de seguridad propuesto. 
  • Promover y fomentar una cultura de seguridad y aprendizaje organizacional para que los errores e incidentes sean sistemáticamente investigados y utilizados para mejorar el sistema.

Beneficios y mejores prácticas

Aplicar correctamente API 1173 permite:

  • Reducir incidentes operacionales, fugas y riesgos ambientales. 
  • Optimizar costos mediante prevención de fallos y sanciones regulatorias.
  • Fortalecer la confianza y reputación ante reguladores y comunidad, mostrando compromiso con la seguridad y gestión responsable. 
  • Alinearse con regulaciones de organismos como la PHMSA y OSHA, evitando penalizaciones legales y económicas. 

Claves para implementación efectiva

Un especialista debe:

  • Realizar diagnósticos de brechas para identificar fortalezas y áreas de mejora. 
  • Diseñar programas de capacitación completos, con módulos sobre gestión de riesgos, respuestas a emergencias y estudios de caso prácticos. 
  • Utilizar métodos mixtos de formación: clases presenciales, cursos en línea y simulaciones prácticas. 
  • Establecer indicadores clave de desempeño y crear mecanismos de retroalimentación y mejora continua. 

Conclusiones 

La gestión de operaciones y mantenimiento en redes midstream constituye un pilar importante para garantizar la confiabilidad, la seguridad y la sostenibilidad de la infraestructura energética. A través de la aplicación de estrategias de gestión de activos, planes de mitigación de riesgos, métricas de desempeño y cumplimiento de normas API, los ingenieros en integridad mecánica aseguran la continuidad operativa y la protección del entorno.

En un contexto de transición energética y creciente exigencia social, las prácticas ESG se suman como una capa indispensable en la gestión de ductos. De esta manera, el sector midstream no solo transporta energía, sino que también impulsa el desarrollo sostenible y la confianza de las partes interesadas.

El futuro de las operaciones y mantenimiento en ductos dependerá de la capacidad de integrar innovación tecnológica, gestión responsable y visión estratégica para enfrentar los retos de un mercado energético en transformación.

Referencias

  1. https://veriforce.com/blog/api-rp-1173
  2. https://www.dco.uscg.mil/Portals
  3. https://www.ecfr.gov/current/title-49/subtitle-B/chapter-VIII
  4. https://www.api.org/
  5. https://inspenet.com/articulo/seguridad-de-oleoductos-con-api-rp-1173/