Introducción
La Gestión de Activos Empresariales (EAM) abarca la supervisión y mantenimiento integral de los activos físicos de una empresa a lo largo de todo su ciclo de vida, desde la fase de planificación de inversiones y adquisiciones, hasta su desmantelamiento. El software EAM facilita a las organizaciones la planificación, optimización, ejecución y seguimiento de las actividades relacionadas con los activos, incluyendo la asignación de recursos, la gestión de riesgos y el cumplimiento normativo.
La carencia de una adecuada gestión y mantenimiento de los activos empresariales puede acarrear periodos de inactividad no planificados, un rendimiento deficiente de los activos e incluso escasez de suministros. Asimismo, algunas entidades confían en los sistemas EAM para evidenciar el cumplimiento de regulaciones y normativas, así como para eximirse de responsabilidades en caso de fallos.
¿Cómo funciona un sistema de Gestión de Activos Empresariales (EAM)?
Los sistemas EAM convencionales anteriormente, se instalaban en entornos locales, la tecnología ha avanzado y las soluciones modernas ahora se implementan en la nube. Esta migración a una plataforma en la nube ofrece una serie de ventajas, como una mayor capacidad de almacenamiento de datos, una seguridad mejorada y una integración más fluida con sistemas complementarios, como los de gestión de la cadena de suministro, gestión de fuerza laboral móvil, sensores IoT, GIS, GPS y otras aplicaciones.
Además, mediante análisis avanzados se pueden obtener insights detallados sobre el rendimiento de los activos, facilitando la identificación de áreas que requieren atención y la optimización de la estrategia de gestión de activos. Se emplean técnicas digitales como el machine learning, realidad aumentada, gemelos digitales y análisis predictivo para anticipar posibles fallos y minimizar el tiempo de inactividad.
La planificación proactiva del mantenimiento se apoya en la programación anticipada de inspecciones y tareas de mantenimiento, priorizando los activos críticos para reducir al mínimo los periodos de inoperatividad. La integración de sistemas EAM con herramientas de gestión de campo extiende las capacidades de gestión a trabajadores remotos, permitiendo la gestión de órdenes de trabajo y procesos de activos tanto en línea como fuera de línea, con funcionalidades enriquecidas y servicios de ubicación.
Además, la integración de datos GIS proporciona una experiencia de usuario basada en mapas, facilitando el seguimiento y la gestión de procesos de mantenimiento desde cualquier ubicación. Esta combinación de tecnologías mejora la eficiencia operativa y la capacidad de respuesta ante incidencias, garantizando un mantenimiento óptimo de los activos empresariales.
La evolución de la Gestión de Activos Empresariales (EAM)
En el pasado, los sistemas de gestión de activos se desplegaban localmente, requiriendo una plataforma separada para cada tipo de activo. Estos sistemas funcionaban de manera aislada, generando datos fragmentados que impedían a las organizaciones obtener una visión integral de su operación.
La supervisión y reporte del estado de los activos dependía principalmente de los trabajadores en distintos niveles de la organización, desde la oficina administrativa hasta el campo. La naturaleza manual de estas tareas conllevaba procesos basados en papel, lo que resultaba en datos desactualizados e inexactos.
La falta de datos en tiempo real imposibilitaba la predicción y el mantenimiento proactivo de los activos. Como consecuencia, las acciones de mantenimiento y reparación eran reactivas, ocasionando fallos en los equipos, interrupciones en la operación y una disminución en la productividad.
En la actualidad, la tecnología EAM suele ser alojada en la nube, permitiendo la recopilación en tiempo real de datos de activos y sistemas diversos. Nuevas tecnologías y herramientas complementarias han facilitado la mejora en la eficiencia y eficacia.
¿Cuál es la diferencia entre EAM y CMMS?
Un Sistema Computarizado de Gestión de Mantenimiento (CMMS) se enfoca en funciones operativas y de mantenimiento destinadas principalmente a maximizar el tiempo de actividad de los activos. Las decisiones se limitan al personal de mantenimiento y operaciones que utiliza estos sistemas, con un enfoque específico en impulsar la disponibilidad operativa de los activos en industrias con alto uso de los mismos.
Por otro lado, un Sistema de Gestión de Activos Empresariales (EAM) está diseñado para abordar la gestión completa del ciclo de vida de un activo, desde la planificación del capital hasta la disposición final. Además de las áreas de mantenimiento y operaciones, los usuarios de EAM incluyen a departamentos financieros, de producción, de cumplimiento y otras partes interesadas en el negocio. Esto amplía la toma de decisiones más allá del ámbito de mantenimiento y operaciones, involucrando a altos directivos y personal de alta dirección.
Las soluciones gestión de activos empresariales EAM; son especialmente relevantes en sectores empresariales como el petróleo y gas. Estas industrias gestionan activos dispersos en áreas diversas, desde zonas urbanas densamente pobladas hasta sitios remotos. Utilizan procesos EAM a traves de datos de sensores, IoT, computación avanzada y análisis para la adquisición, instalación y gestión de activos, permitiendo una gestión predictiva e inteligente que es fundamental para un futuro.
La gestión de activos empresariales (EAM) es la combinación de software, sistemas y servicios que mantienen y controlan los activos y equipos operativos. El objetivo de EAM es optimizar la calidad y la utilización de los activos a lo largo de su ciclo de vida, aumentar el tiempo de actividad productiva y reducir los costos operativos. La gestión de activos empresariales implica gestión del trabajo, mantenimiento de activos, planificación y programación, gestión de la cadena de suministro e iniciativas ambientales, de salud y seguridad.
Conclusiones
La implementación de sistemas EAM mejora significativamente el cumplimiento normativo al automatizar el seguimiento de estándares y regulaciones. Además, ayuda a las empresas a identificar y evaluar riesgos de manera más efectiva, permitiendo la implementación de estrategias de mantenimiento preventivo para mitigar posibles fallas y minimizar las interrupciones en procesos críticos.
Los sistemas EAM proporcionan información crucial que guía las estrategias empresariales y las decisiones de inversión. Las capacidades analíticas basadas en IoT permiten evaluar la rentabilidad de los activos y los costos asociados, lo que lleva a decisiones más informadas y rentables en términos de mantenimiento y operaciones.
La excelencia en el mantenimiento, respaldada por prácticas EAM y RBM, conduce a la excelencia en la fabricación y, en última instancia, a mejores resultados para todas las partes involucradas, incluidos los clientes finales. En un entorno empresarial global competitivo, la optimización y la búsqueda de excelencia en todas las áreas operativas son esenciales para el éxito a largo plazo y la satisfacción del cliente.
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