Introducción
Actualmente, la descarbonización del sector midstream es una necesidad ambiental, y también una oportunidad para mejorar la eficiencia operativa y abrir nuevas vías de negocio. Este sector es el encargado del transporte, almacenamiento y distribución de hidrocarburos, enfrenta el desafío de adaptarse a un mundo cada vez más consciente del cambio climático. CO2, Bajo este contexto, es importante abordar la siguiente pregunta: ¿Cómo el sector midstream se está preparando para la descarbonización de los procesos?
La necesidad de reducir las emisiones de Gases de Efecto Invernadero (GEI) está impulsando a las empresas del sector a buscar tecnología de descarbonización y estrategias para operar de manera más sostenible. En este artículo, se exponen los avances en la descarbonización del sector midstream, analizando las principales estrategias que se están implementando para reducir las emisiones de GEI y cómo optimizar el sector con soluciones para construir un futuro más sostenible.
Principales estrategias de descarbonización del sector midstream
Captura y almacenamiento de carbono (CCS)
La captura y almacenamiento de carbono (CCS) surge como una tecnología de descarbonización innovadora y prometedora para reducir las emisiones de efecto invernadero durante el transporte, almacenamiento y procesamiento de petróleo y gas natural.
¿Qué es la CCS?
El Global CCS Institute, (por sus siglas en inglés: Carbon Capture and Storage), es un grupo de expertos internacional cuya misión es acelerar el despliegue de la Captura y Almacenamiento de Carbono (CAC), una tecnología significativa en el logro de la neutralidad y por ende del cambio climático.
La CCS es un proceso en dos etapas
- Almacenamiento: El CO2 capturado se transporta a formaciones geológicas subterráneas profundas, como acuíferos salinos o depósitos de petróleo y gas agotados, donde se almacena de forma segura durante miles de años. La capacidad global de almacenamiento del dióxido de carbono para proyectos de CCS es de aproximadamente 2.500 giga toneladas, lo que equivale a más de 100 años de emisiones globales de CO2.
- Captura: Este gas nocivo emitido durante el procesamiento del petróleo y gas natural se separa de los gases de combustión utilizando diferentes técnicas, como la absorción con aminas o la absorción con membranas. Se estima que la CCS podría capturar y almacenar hasta el 70% de las emisiones globales de CO2 provenientes de la quema de combustibles fósiles.
La Captura y Almacenamiento de Carbono (CAC) se presenta como organización fundamental en la descarbonización y la construcción de un futuro más sostenible para las nuevas generaciones. La tecnología de captura y almacenamiento de carbono ha experimentado un aumento constante tanto en el interés como en la adopción en los últimos años. A medida que el progreso de la CAC continúa creciendo, el Instituto aspira a desempeñar un papel importante en la aceleración de este proceso a nivel global.
Electrificación con energia renovable
La electrificación de procesos como el bombeo de petróleo y gas natural puede disminuir las emisiones de GEI. Las empresas invierten en construir nuevas instalaciones eléctricas y convertir las existentes a energía eléctrica. Por ejemplo, algunos oleoductos y gasoductos están siendo aprovisionados con energía eléctrica utilizando energía solar y eólica, lo que reduce significativamente las emisiones de carbono.
Optimización de la eficiencia energética
La mejora de la eficiencia energética en las operaciones del sector midstream ayuda a reducir las emisiones de GEI. Las empresas implementan medidas como la automatización de los procesos, el uso de tecnologías de control más eficientes, la adquisición y actualización de equipos.
Transporte de gases renovables
El sector midstream también explora el transporte y almacenamiento de gases renovables como el hidrógeno y el biogás, que pueden ayudar a reducir la dependencia de los combustibles fósiles y las emisiones de GEI.
Otras estrategias de descarbonización
- Compensación de emisiones: Las empresas del sector pueden compensar sus emisiones de GEI invirtiendo en proyectos que reduzcan las emisiones en otras partes del mundo.
- Investigación y desarrollo: Las empresas invierten en I+D para encontrar nueva tecnología de descarbonización y soluciones midstream.
- Colaboración: Las empresas del sector colaboran con gobiernos, ONG y otras partes interesadas para desarrollar e implementar estrategias de descarbonización.
Ejemplos de implementación de las tecnologias
Empresas como Shell y ExxonMobil ya están implementando proyectos de CCS en sus instalaciones midstream, marcando un camino hacia un futuro más limpio.
Equinor, la compañía energética noruega, está invirtiendo en la electrificación de sus operaciones midstream, reduciendo significativamente las emisiones de GEI.
Kinder Morgan, una de las empresas de infraestructura energética más grandes de América del Norte, está implementando iniciativas de eficiencia energética en sus operaciones midstream, optimizando el uso de energía y reduciendo su huella ambiental.
Optimización de las operaciones midstream
La optimización de las operaciones midstream se ha convertido en una prioridad para las empresas que buscan mejorar la eficiencia, reducir costos y minimizar su impacto ambiental. Esta sección del artículo se enfoca en las diversas estrategias y tecnologías que están impulsando esta optimización, destacando su importancia para la sostenibilidad y la competitividad en el sector energético.
Estrategias para la optimización de las operaciones
Mejora de la eficiencia energética
Una de las formas más efectivas de optimizar las operaciones midstream es mejorar la eficiencia energética de los equipos e instalaciones. Esto incluye:
- Actualización de equipos: Sustitución de compresores, bombas y otros equipos antiguos por modelos más eficientes que consumen menos energía y producen menos emisiones.
- Sistemas de gestión energética: Implementación de sistemas avanzados de gestión energética que monitorizan y optimizan el uso de energía en tiempo real, identificando oportunidades para reducir el consumo y mejorar la eficiencia.
Implementación de tecnologías digitales
La digitalización está revolucionando el sector midstream, proporcionando herramientas para la optimización de las operaciones midstream. Algunas tecnologías clave incluyen:
- Sensores y IoT (Internet de las cosas): Instalación de sensores en toda la infraestructura midstream para recolectar datos en tiempo real sobre el rendimiento de los equipos, las condiciones operativas y las emisiones.
- Análisis de datos y IA (Inteligencia artificial): Utilización de análisis de datos avanzados y algoritmos de inteligencia artificial para interpretar los datos recolectados, identificar patrones y predecir problemas antes de que ocurran.
- Sistemas de control y automatización: Implementación de sistemas de control automatizados que ajustan las operaciones en tiempo real para maximizar la eficiencia y minimizar las emisiones.
Estas nuevas tecnologías mejoran la eficiencia operativa, y ayudan a identificar y reducir las emisiones de GEI.
Reducción de emisiones de metano
El metano es un gas de efecto invernadero potente y su reducción es crucial para la sostenibilidad del sector midstream. Las estrategias para reducir las emisiones de metano incluyen:
- Detección y reparación de fugas: Implementación de programas de detección y reparación de fugas (LDAR) utilizando tecnologías avanzadas como drones y cámaras infrarrojas para identificar y reparar fugas de metano rápidamente.
- Mejores prácticas operativas: Adopción de mejores prácticas operativas que minimizan las emisiones durante el transporte (ver video) y almacenamiento de gas natural, como el uso de válvulas y compresores sellados.
Estas soluciones son significativas en la optimización de las operaciones en el sector midstream y en la reducción del impacto ambiental. A continuación, se presenta un video en relación con el tema expuesto, cortesía de: CNA Insider.
Desarrollo de infraestructuras para hidrógeno
El desarrollo de infraestructuras para el transporte de este gas es crucial para la transición hacia fuentes de energía más limpias y sostenibles. En primer lugar, se están diseñando y construyendo redes de tuberías específicas, de materiales avanzados y técnicas de ingeniería resistentes a la alta reactividad del H2.
El hidrógeno verde, producido mediante electrólisis del agua utilizando energía renovable, es una solución prometedora para la descarbonización. Además de la construcción de nuevas infraestructuras específicas para este propósito, las empresas midstream están estudiando las alternativas para el uso de los gasoductos existentes para el transporte de H2.
En la figura 1, se puede observar, un gasoducto transportando hidrógeno verde para instalaciones de electricidad limpia, solares y eólicas.
Estos gasoductos deben estar fabricadas con materiales resistentes a la fragilidad inducida por el hidrógeno para evitar fugas y garantizar la seguridad. Además, la implementación de estaciones de compresión y almacenamiento es esencial para mantener la eficiencia y continuidad en el suministro, permitiendo una distribución efectiva desde los centros de producción hasta los puntos de consumo.
Conclusiones
La descarbonización del sector midstream es un proceso integral que requiere la adopción de energías renovables, la implementación de tecnologías de captura y almacenamiento de carbono, la mejora de la eficiencia energética y la reducción de emisiones de metano. La digitalización y el desarrollo de infraestructuras para hidrógeno también jugarán un papel crucial en esta transformación, con un enfoque estratégico y el uso de tecnología de descarbonización, el sector midstream puede contribuir significativamente a un futuro más sostenible.
A medida que el sector industrial avanza, es importante que las empresas continúen innovando y colaborando para enfrentar los desafíos del cambio climático y aprovechar las oportunidades que surgen en el camino hacia la sostenibilidad con soluciones midstream.
¡Descubre cómo el sector midstream está liderando la transición hacia un futuro más sostenible!
Referencias
Fuente propia