Autor: Mayuly Rodríguez, 1 julio 2023
Introducción
El cambio climático, una realidad innegable en nuestros tiempos, ha generado un impacto significativo en diversos sectores de la economía mundial. Entre los afectados se encuentra la industria petrolera, cuyas infraestructuras se enfrentan a un desafío doble, la corrosión acelerada debido a este fenómeno y los consecuentes efectos adversos en su sostenibilidad, originado perdidas económicas.
La corrosión por el cambio climático se ha convertido en una preocupación para la industria petrolera. A medida que las temperaturas aumentan, los patrones de precipitación se alteran y los fenómenos climáticos se intensifican, las instalaciones petroleras se ven expuestas a condiciones más corrosivas.
Hoy en día existe la urgencia de encontrar medidas preventivas y soluciones innovadoras para enfrentar este proceso inducido por este factor. Es necesario documentar las consecuencias que el calentamiento global ha traído consigo para este sector industrial, con el fin de respaldar a largo plazo estos efectos.
Existe una preocupación universal por la influencia del cambio climático, el calentamiento global y las emisiones de gases de efecto invernadero (todos fenómenos complejos interrelacionados) sobre los efectos corrosivos en el medio industrial.
A medida que el calentamiento global avanza, ¿qué desafíos emergen en la industria petrolera, siendo ésta una de las principales contribuyentes al cambio climático? La respuesta está en concientizar a las industrias en reducir la huella ambiental de sus propias operaciones.
Corrosión en la industria petrolera y su relación con el cambio climático
Es un proceso natural que afecta a diversos materiales, se vuelve aún más preocupante en el contexto del calentamiento global, debido a la contaminación ambiental. ¿Qué es la corrosión y cómo se relaciona con este fenómeno global? ¿Cuáles son los factores climáticos que intensifican la corrosión en las infraestructuras petroleras?
Este fenómeno natural de oxidación puede definirse como la degradación gradual de un material debido a reacciones químicas y electroquímicas con su entorno. En el caso de la industria petrolera, esto implica la degradación y el daño de las estructuras, equipos y tuberías utilizados en la exploración, producción, almacenamiento y transporte de petróleo y sus derivados.
La relación entre la corrosión y el cambio climático es compleja y significativa. Los factores climáticos extremos aceleran los procesos corrosivos en cualquier industria, por consecuencia también afecta las infraestructuras petroleras. Uno de los principales factores es el aumento de la temperatura, donde el calentamiento global favorece reacciones electroquímicas más rápidas y agresivas, lo que conduce a un deterioro acelerado de los materiales, principalmente los materiales existentes, los cuales fueron seleccionados o diseñados bajo otros parámetros de condiciones ambientales.
Además del aumento de la temperatura, los cambios en los ciclos de lluvia, el dióxido de carbono, los vientos cambiantes y la contaminación ambiental también contribuyen a la degradación de los materiales. Las fluctuaciones en los niveles de humedad relativa y la presencia de lluvias ácidas debido al ambiente contaminado, particularmente en áreas industrializadas, generan entornos más corrosivos.
El daño de los metales por la lluvia depende del pH de la lluvia, la intensidad, la duración y la cantidad. La presencia de SO2 disminuye el pH de la lluvia y provoca un ataque químico más rápido, generando indicativos corrosivos.
Las temperaturas más altas promoverán el derretimiento del hielo, las nieves polares y glaciales, aumentarán la expansión térmica del agua de mar, lo que dará como resultado un aumento global irregular de la humedad. Esto tendrá un impacto en el ciclo hidrológico, lo que dará como resultado una mayor humedad y precipitaciones y, con el tiempo, un aumento del nivel del mar y de los volúmenes de agua subterránea. El cambio de temperatura dará como resultado un clima extremo que alterará la severidad y la periodicidad de los ciclos húmedo/seco y causará problemas las infraestructuras industriales y otros sectores1.
Consecuencias del aumento de la corrosión en la industria petrolera debido al cambio climático
La corrosión acelerada en las infraestructuras petroleras, impulsada por los cambios climáticos, conlleva una serie de consecuencias significativas tanto en términos económicos como ambientales. Aquí se mencionan algunas de las principales:
Pérdidas económicas: Las infraestructuras corroídas son propensas a fallas prematuras, lo que resulta en interrupciones en la producción y en la cadena de suministro de petróleo. Esto se traduce en baja productividad y disminución de los ingresos para el sector petrolero.
Además, los costos asociados con el mantenimiento y reparación de los activos que fallen se vuelven considerablemente altos. Las empresas petroleras se enfrentan a gastos adicionales para mitigar los efectos del proceso de oxidación, buscar nuevas estrategias, sustituir sistemas de pintura, reemplazar equipos dañados y llevar a cabo labores de mantenimiento más frecuentes; lo cual ocasiona costos adicionales en la carga financiera e impactan la rentabilidad a largo plazo.
Daños ambientales: Los efectos de la corrosión en la industria petrolera también impacta al medio ambiente, los derrames y fugas de petróleo resultantes de infraestructuras corroídas de forma acelerada debido al cambio climático, expones a graves consecuencias ambientales a los entornos donde ocurran. Estos efectos también se interrelacionan con las pérdidas económicas, debido a que generan sanciones regulatorias, demandas legales y las compensaciones para los afectados.
Sostenibilidad de la industria petrolera frente al desafío de la corrosión inducida por el cambio climático
La corrosión acelerada en la industria petrolera plantea adversidades para la sostenibilidad a largo plazo de esta industria tan importante a nivel mundial. A Continuación, se mencionan algunos de los factores a tomar en cuenta:
Riesgos a largo plazo: El deterioro de las infraestructuras y los equipos conlleva a posibles interrupciones en la producción. Además, la dependencia continua de los recursos petroleros se ve amenazada por la necesidad de una mayor inversión en el mantenimiento y la reparación de las infraestructuras afectadas.
Estos factores, en conjunto con la sostenibilidad ambiental, implica, que la industria petrolera tenga la necesidad de desarrollar soluciones efectivas y responsables con el ambiente para minimizar a largo plazo los efectos negativos en sus activos.
Innovaciones y avances tecnológicos para combatir la corrosión ocasionada por el cambio climático: La industria petrolera trabaja enérgicamente en el desarrollo de innovaciones y tecnologías en general, pero hoy en día en las investigaciones es obligatorio incluir todas las variables influyentes por el continuo avance del cambio climáticos. Se están implementando métodos y materiales más resistentes como: revestimientos protectores especiales y aleaciones específicas, que prolonguen la vida útil de los activos.
Además, la monitorización y el mantenimiento predictivo se están volviendo cada vez más importantes para detectar los problemas de fallas y defectos. La incorporación de sensores y sistemas de monitoreo avanzados permite un seguimiento continuo de las condiciones de corrosión y facilita la toma de decisiones para la gestión y el mantenimiento de las infraestructuras críticas ubicadas en entornos ambientalmente agresivos.
Políticas y regulaciones en torno a la protección contra la corrosión: Son fundamentales en la protección de las infraestructuras en la industria petrolera. Es necesario establecer e implementar normativas más estrictas para garantizar la protección del medio ambiente y con esto aportar con la mejora de la integridad y seguridad de las infraestructuras.
Adicionalmente, promueven la aplicación de estándares de diseño, selección de materiales y construcción que consideren los múltiples factores que emergen por el cambio climático como elementales. Asimismo, fomentan la implementación de programas de inspección y mantenimiento periódicos, y se exige el cumplimiento de prácticas de gestión de riesgos para mitigar los efectos de la corrosión.
Importancia de la colaboración entre los involucrados y afectados: La lucha contra este fenómeno natural inducido por el cambio climático en la industria petrolera requiere una colaboración estrecha y eficaz entre diferentes actores. La industria, los gobiernos, las comunidades circundantes y los organismos reguladores deben trabajar en conjuntos para compartir conocimientos, promover la investigación y establecer estrategias de mitigación efectivas, colaborando con la sostenibilidad ambiental.
Conclusión
Para proteger las instalaciones petroleras y asegurar la continuidad de la industria, es fundamental buscar soluciones sostenibles y adoptar medidas preventivas efectivas. La conciencia sobre los efectos del cambio climático en la corrosión debe ser ampliada y difundida, en particular por aquellos expertos en nuevas tecnologías, biocombustibles y sostenibilidad.