El proyecto eólico marino Inch Cape, situado a 15 kilómetros de la costa de Angus en el Mar del Norte, ha alcanzado un nuevo paso clave con la instalación del primer cable de exportación offshore, uno de los dos que se instalaran. Esta infraestructura, de 85 kilómetros de longitud y fabricada por Orient Cable, será fundamental para transportar energía hacia tierra firme.
El cable, trifásico y de 220 kV, fue tendido en tres tramos de 28 kilómetros desde el buque especializado CMOS Installer, operado por Enshore Subsea desde el puerto de Blyth. Esta conexión permitirá trasladar la energía generada por el parque de 1,1 GW hasta la subestación terrestre en construcción en Cockenzie, East Lothian.
Instalación del cable de exportación offshore
Para garantizar la continuidad del cable en el lecho marino, se llevaron a cabo dos uniones submarinas utilizando el buque North Sea Giant. Posteriormente, el cable fue enterrado bajo el lecho marino para su protección. Este componente, de 2000 mm² de sección, se encuentra entre los cables de corriente alterna de mayor capacidad instalados a nivel mundial.
La instalación del segundo cable de exportación está prevista para 2026, también a cargo de Enshore Subsea, replicando el mismo esquema de tres tramos. Con esto, el proyecto completa su infraestructura de transmisión submarina hacia tierra.
Coordinación entre actores clave del sector marino
La ejecución de esta etapa fue posible gracias a la colaboración entre Inch Cape Offshore Limited, Enshore Subsea y Orient Cable. John Hill, director del proyecto, destacó la relevancia de esta fase como el vínculo que conectará la futura subestación marina con la infraestructura terrestre.
Por su parte, Pierre Boyde, director ejecutivo de Enshore Subsea, subrayó la complejidad y seguridad del procedimiento ejecutado.
Camino a la operación comercial en 2027
El parque eólico Inch Cape es una iniciativa conjunta entre la irlandesa ESB y Red Rock Renewables, cada una con el 50% de participación. Actualmente se encuentra en plena fase de construcción offshore, con la plataforma de la subestación marina ya instalada y los primeros monopilotes entregados en el puerto de Leith.
Durante el próximo año se instalarán las cimentaciones tipo jacket y se desplegará la primera de las 72 turbinas Vestas de 15 MW. Se espera que el proyecto comience a generar energía a finales de 2026 y alcance su operación comercial completa en 2027, abasteciendo aproximadamente a la mitad de los hogares de Escocia con energía limpia.
Fuente y foto: Inch Cape