En esta semana, el Centro de Investigación en Robótica y Tecnologías Subacuáticas (CIRTESU) de la Universitat Jaume I se realizaron pruebas en PortCastelló con el pez robot que acaba de recibir el reconocimiento nacional al mejor trabajo en automatización marina durante el congreso del Comité Español de Automatización celebrado en Cartagena, Colombia.
La automatización del pez robot
Este sistema robótico subacuático integra aletas biomiméticas, comunicación umbilical y un sonar auxiliar. Además, su capacidad más destacada es la de desplegar y recuperar sensores en el medio marino, lo que lo convierte en una herramienta clave para la inspección y el mantenimiento de instalaciones acuícolas. Entre sus funciones sobresale un módulo de inspección visual diseñado para revisar redes de piscifactorías desde el interior, con el objetivo de mejorar la seguridad y el bienestar animal.
Según el investigador Raúl Marín, la estrategia de CIRTESU consiste en validar cada avance primero en ambientes controlados y luego en escenarios reales como el Puerto de Castelló. Allí, el personal de la Autoridad Portuaria colabora de manera continua en las pruebas que se repiten cada dos meses. Para Rubén Ibáñez, presidente de la entidad, este trabajo fortalece la posición del puerto como polo de innovación orientado a infraestructuras más seguras y sostenibles.
Este proyecto forma parte de la tesis doctoral de Andrea Pino Jarque y está dirigido por los investigadores María Rosario Vidal y Raúl Marín, con la coordinación del profesor Pedro J. Sanz. También han participado jóvenes graduados en inteligencia robótica como Max Puig Sariñena, quien desarrolló experimentos de comunicación submarina bajo la supervisión del profesor Juan Echagüe.
El pez robot simboliza un avance tecnológico en automatización marina, mientras proyecta el potencial de la investigación universitaria aplicada al sector productivo. CIRTESU ha señalado que la siguiente etapa incluirá sistemas capaces de reparar redes, lo que abre nuevas posibilidades para el futuro de la acuicultura sostenible.
Fuente y foto: UJI