Tabla de Contenidos
- Introducción
- ¿Qué es el asfalto?
- ¿Cómo se produce el asfalto?
- ¿De qué está hecho el asfalto? Composición química del ligante
- ¿Por qué existen distintos tipos de asfalto?
- Tipos de asfalto: Clasificación técnica según composición y tecnología de aplicación
- Propiedades técnicas del asfalto
- Asfaltos ecológicos
- ¿Cómo influyen los aditivos poliméricos a las propiedades mecánicas del asfalto?
- Conclusiones
- Referencias
Introducción
El asfalto es un material bituminoso de comportamiento viscoelástico y termoplástico, compuesto por hidrocarburos de alto peso molecular derivados del residuo pesado del petróleo. Su aplicación principal radica en la construcción de infraestructuras viales debido a su capacidad para resistir cargas dinámicas, deformaciones térmicas y exposición ambiental. Además de sus propiedades mecánicas y de impermeabilidad, el asfalto se adapta a diversos entornos mediante formulaciones específicas que integran agregados minerales, aglutinantes y aditivos modificadores.
¿Qué es el asfalto? ¿Cómo se produce el asfalto? Estas preguntas son precisas para comprender las propiedades del asfalto y su comportamiento frente a esfuerzos térmicos y mecánicos. La ingeniería de mezclas asfálticas permite ajustar su desempeño estructural, térmico y reológico a los requisitos técnicos de cada proyecto. En este artículo se diserta sobre puntos de interés como la clasificación técnica, composición química, propiedades reológicas y los distintos tipos de asfalto.
¿Qué es el asfalto?
El asfalto se define técnicamente como un material bituminoso complejo, predominantemente compuesto por hidrocarburos de alto peso molecular (asfaltenos y maltenos), originado como residuo de la destilación fraccionada del petróleo crudo (ASTM D8). A temperatura ambiente, exhibe un comportamiento sólido o semisólido, actuando como matriz aglutinante en la conformación de mezclas asfálticas que cohesionan agregados minerales.
Cumpliendo con normativas como AASHTO M320, el asfalto confiere cohesión interna, impermeabilidad y resistencia a pavimentos expuestos a las tensiones inducidas por el tráfico, ciclos térmicos y la agresividad ambiental. Su naturaleza termoplástica y su hidrofobicidad, junto con su capacidad para disipar energía bajo cargas dinámicas, lo posicionan como un material fundamental en la construcción de superficies de rodadura duraderas y de alto rendimiento.
¿Cómo se produce el asfalto?
La producción de asfalto se articula a través de procesos de refinación:
- Destilación atmosférica: El crudo se fracciona a ≈400 °C, separando componentes volátiles y generando un residuo atmosférico rico en hidrocarburos pesados.
- Destilación al vacío: El residuo se destila a presión reducida para obtener el asfalto base (betún o bitumen), evitando la degradación térmica.
A partir del asfalto base, se derivan productos especializados mediante procesos de modificación:
- Asfalto oxidado: Tratado mediante la inyección de aire caliente, para incrementar la estabilidad térmica, aplicado principalmente en impermeabilización.
- Asfalto modificado con polímeros: Incorporación de polímeros para mejorar la viscoelasticidad y resistencia a la deformación plástica, estratégico en pavimentos de alto esfuerzo.
- Emulsiones asfálticas: Dispersiones asfálticas en agua estabilizadas con tensioactivos, permitiendo aplicaciones en frío, como riegos de liga y reciclaje.
- Asfaltos líquidos (Cutbacks): Asfaltos diluidos en solventes volátiles para reducir la viscosidad y facilitar la aplicación a bajas temperaturas (uso limitado por regulaciones ambientales).
El siguiente video “History of Simple Things” ilustra que es el asfalto, su proceso de producción, desde la obtención de agregados y betún hasta la mezcla (con posibles aditivos poliméricos), el transporte y la colocación en la construcción vial. También aborda aspectos de sostenibilidad como el reciclaje y futuras innovaciones en el sector.

¿De qué está hecho el asfalto? Composición química del ligante
A nivel molecular, el asfalto base es un sistema coloidal complejo de hidrocarburos de elevado peso molecular, organizado en dos fases principales que determinan sus propiedades macroscópicas:
- Asfaltenos (5-25%): Fracción polar de alto peso molecular, insoluble en solventes alifáticos, responsable de la rigidez, viscosidad y estabilidad coloidal del asfalto. Su estructura poliaromática condensada confiere características de resistencia a la deformación.
- Maltenos (75-95%): Fase continua apolar que dispersa los asfaltenos, subdividida en:
- Resinas: Moléculas polares que contribuyen a la adhesividad (interacción ligante-agregado), cohesión interna y estabilidad del sistema coloidal.
- Aceites Aromáticos: Componentes de menor polaridad que actúan como solventes internos para los asfaltenos, esenciales para la compatibilidad y la flexibilidad del ligante.
- Aceites Saturados: Hidrocarburos alifáticos que influyen en la fluidez, trabajabilidad a temperaturas de mezcla y el comportamiento térmico del asfalto.
La interrelación y proporción de estas fracciones definen las propiedades reológicas (viscoelasticidad), térmicas (susceptibilidad a la temperatura) y mecánicas (resistencia a la deformación y fractura) del ligante, así como su capacidad para ser modificado o emulsionado para aplicaciones específicas.
¿Por qué existen distintos tipos de asfalto?
La diversidad de tipos de asfalto es una consecuencia directa de la necesidad de optimizar el comportamiento del material en función de las demandas específicas de cada aplicación ingenieril. Factores críticos que impulsan esta diversificación incluyen:
- Condiciones climáticas: La respuesta viscoelástica del asfalto debe adaptarse a rangos de temperatura operativos extremos. En climas fríos, se prioriza la flexibilidad para mitigar el agrietamiento térmico, mientras que, en climas cálidos, se requiere alta resistencia al flujo para prevenir deformaciones plásticas.
- Cargas de tráfico: El volumen y la magnitud de las cargas vehiculares imponen requisitos distintos en términos de resistencia a la deformación permanente (ahuellamiento) y al daño por fatiga (agrietamiento repetitivo).
- Restricciones operativas: La temperatura de mezclado y colocación, la logística de transporte y almacenamiento, y las consideraciones de eficiencia energética influyen en la selección del tipo de asfalto.
- Objetivos de sostenibilidad: La creciente importancia de la reducción del impacto ambiental impulsa el desarrollo de asfaltos con menor huella de carbono, a través del reciclaje, la reducción de temperaturas de producción y el uso de materiales alternativos.
Por eso, la industria ha desarrollado variantes que pueden agruparse en asfaltos convencionales, modificados, por tecnología de mezcla o en forma de emulsiones y diluciones. Así como asfaltos ecológicos. A continuación, se presenta una clasificación detallada de estos tipos.
Tipos de asfalto: Clasificación técnica según composición y tecnología de aplicación
La clasificación técnica del asfalto se fundamenta en su origen, el nivel de procesamiento al que se somete y la metodología de aplicación en obra. Esta segmentación permite una selección precisa del material en función de las exigencias del proyecto.
Asfaltos base
- Cementos asfálticos (asfaltos convencionales): Se obtienen directamente de la destilación del petróleo, son la base para la mayoría de las mezclas asfálticas. Su clasificación se basa en propiedades físicas estandarizadas:
- Grado de penetración: (ASTM D5) Medida de la consistencia a 25 °C (0.1 mm). Valores altos indican menor viscosidad.
- Viscosidad: (ASTM D88, D2171, D2170) Resistencia al flujo a temperaturas específicas (e.g., 60 °C para viscosidad dinámica, 135 °C para viscosidad cinemática). Designaciones como AC-5, AC-10, AC-30 reflejan rangos de viscosidad.
- Grado de desempeño (PG): (AASHTO M320) Sistema Superpave que especifica el rendimiento del asfalto en función de las temperaturas máxima y mínima de servicio esperadas (e.g., PG 64-22, PG 70-28).
- Asfaltos oxidados (o soplados): (ASTM D312) Producidos por insuflación de aire caliente, resultando en un mayor punto de ablandamiento y menor penetración. Su menor ductilidad los orienta a aplicaciones de impermeabilización y sellado.
- Asfalto natural: Betún mineralizado de alta viscosidad extraído de depósitos geológicos. Su uso, aunque limitado, aporta alta resistencia al envejecimiento y rigidez térmica en mezclas especializadas.
Asfaltos modificados
- Asfalto modificado con polímeros (PMA): (ASTM D5976) La adición de polímeros sintéticos (elastómeros o plastómeros) altera significativamente las propiedades reológicas del asfalto base, mejorando su respuesta elástica, resistencia a la deformación plástica y al agrietamiento.
- Modificados con elastómeros (EMA): (e.g., SBS) Incrementan la recuperación elástica, la resistencia al ahuellamiento y la flexibilidad a bajas temperaturas, crucial en pavimentos de alta carga y zonas de frenado.
- Modificados con plastómeros (EMP): (e.g., EVA, PE) Mejoran la rigidez a altas temperaturas, la estabilidad dimensional y la resistencia al agrietamiento por fatiga.
Tecnologías de aplicación de mezclas asfálticas
- Mezcla asfáltica en caliente (HMA): (AASHTO M323) En el asfalto mezclado en caliente los agregados y ligante se mezclan a altas temperaturas (140-190 °C) para asegurar una adecuada trabajabilidad y compactación. Ofrece alta durabilidad y estabilidad estructural, siendo la tecnología predominante para capas de rodadura y bases. Variedades como SMA (Stone Mastic Asphalt) y mezclas discontinuas se diseñan para requerimientos específicos de resistencia al ahuellamiento y ruido. La alta temperatura de mezcla y colocación asegura una óptima adhesión interpartículas y entre capas.
- Mezcla tibia (WMA): (FHWA Technical Brief) Producida a temperaturas más bajas (110-140 °C) mediante aditivos o espumado del asfalto, reduciendo el consumo energético y las emisiones. La optimización de la viscosidad y la humectación de los agregados a temperaturas reducidas son clave para su desempeño.
- Mezcla en frío (CMA): (ASTM D4867) Utiliza emulsiones asfálticas o asfaltos diluidos mezclados con agregados a temperatura ambiente. Adecuada para reparaciones no estructurales y caminos de bajo volumen, su curado depende de la evaporación del agua o solventes. Su resistencia mecánica inicial es inferior al asfalto mezclado en caliente.

Sistemas dispersos y soluciones
- Emulsiones asfálticas: (ASTM D977, D2397) Dispersiones coloidales de asfalto en agua estabilizadas por agentes tensioactivos. Su clasificación por carga iónica (catiónica/aniónica) y velocidad de rotura (rápida/media/lenta) determina su aplicabilidad en tratamientos superficiales, reciclado en frío y como ligante en capas de bajo espesor. La selección del tipo de emulsión depende de la reactividad con los agregados y el tiempo de trabajabilidad requerido.
- Asfaltos diluidos (Cutbacks): (ASTM D2028, D2027, D2026) Asfaltos fluidificados mediante solventes volátiles (nafta, queroseno). Clasificados por velocidad de curado (rápido/medio/lento), se utilizan principalmente en imprimaciones y riegos de adherencia, aunque su uso está restringido por las emisiones de COV.
La selección del tipo de asfalto y la tecnología de aplicación debe basarse en un análisis técnico exhaustivo de las condiciones de servicio, las propiedades requeridas del pavimento y las consideraciones ambientales y económicas del proyecto.
Propiedades técnicas del asfalto
Las propiedades del asfalto son determinantes para predecir su comportamiento en las mezclas asfálticas y desempeño a largo plazo:
- Penetración: Indica la consistencia relativa mediante la profundidad que alcanza una aguja estándar a 25 °C bajo condiciones normadas. Asfaltos con mayor penetración son más blandos, adecuados para climas fríos, mientras que valores bajos corresponden a asfaltos más duros.
- Viscosidad: (ASTM D88, D2171, D2170) Es la resistencia al flujo a temperaturas específicas, influyendo en la trabajabilidad y la resistencia al ahuellamiento.
- Punto de ablandamiento (Anillo y Bola): (ASTM D36) Temperatura a la cual el asfalto fluye bajo carga, indicador de resistencia a la deformación plástica a altas temperaturas.
- Ductilidad: (ASTM D113) Capacidad de deformación sin fractura a 25 °C, relevante para la resistencia al agrietamiento por fatiga y contracción térmica.
- Recuperación elástica: (ASTM D5976) Porcentaje de deformación recuperada tras la eliminación de la carga, fundamental en asfaltos modificados para la resistencia a deformaciones permanentes.
- Susceptibilidad térmica: Variación de la viscosidad con la temperatura, idealmente baja para un comportamiento estable en diferentes climas.
- Adhesividad: Interacción interfacial entre el asfalto y los agregados, crítica para la resistencia al daño por humedad y la durabilidad de la mezcla.
- Resistencia al envejecimiento: (ASTM D2872, D6521) Evaluación de la degradación del asfalto por oxidación y volatilización a largo plazo, mediante ensayos como RTFOT (Rolling Thin Film Oven Test) y PAV (Pressure Aging Vessel).
Asfaltos ecológicos
La mitigación de las emisiones de GEI en la industria asfáltica impulsa el desarrollo de soluciones con menor huella de carbono:
- Asfalto templado (WMA): Requiere menos energía térmica, por consiguiente, reduce el consumo energético y las emisiones durante la producción y colocación.
- Asfalto en frío (CMA): Elimina la necesidad de calentamiento, minimizando el impacto energético.
- Asfalto reciclado (RAP): Reutilización de pavimentos existentes, conservando recursos naturales y reduciendo residuos.
- Asfaltos con aditivos ecológicos: Incorporación de materiales reciclados (plásticos, caucho) o bio-basados para mejorar el funcionamiento y reducir el impacto ambiental.
- Asfalto autorreparable: Tecnologías que prolongan la vida útil del pavimento, disminuyendo la frecuencia de mantenimiento y la demanda de nuevos materiales.
- Asfalto con grafeno: Aditivo nanométrico que mejora las propiedades mecánicas y la durabilidad, permitiendo la reducción del ligante convencional.
- Asfalto poroso: Es una mezcla asfáltica especializada para pavimentos permeables. Su granulometría abierta, con predominio de agregados gruesos uniformes y menor ligante, crea un alto volumen de vacíos interconectados (15-25%) que permiten la infiltración de agua.
¿Cómo influyen los aditivos poliméricos a las propiedades mecánicas del asfalto?
La incorporación de polímeros en la matriz asfáltica genera modificaciones significativas en su comportamiento mecánico:
- Incremento de la elasticidad: Los elastómeros forman una red tridimensional dentro del asfalto, permitiendo una mayor recuperación elástica tras la deformación, lo que mejora la resistencia al agrietamiento por fatiga.
- Mejora de la resistencia al ahuellamiento: Los polímeros aumentan la rigidez del asfalto a altas temperaturas de servicio, reduciendo la susceptibilidad a la deformación plástica bajo cargas repetidas.
- Optimización de la resistencia al agrietamiento térmico: La flexibilidad a bajas temperaturas se mantiene o incluso se incrementa, previniendo la formación de fisuras inducidas por la contracción térmica.
- Prolongación de la vida útil: La mejora integral de las propiedades mecánicas conduce a una mayor durabilidad del pavimento y una reducción de los costos de mantenimiento a largo plazo.
Conclusiones
La clasificación técnica de los tipos de asfalto, su modificación con polímeros y el uso de mezclas con bajo impacto ambiental permiten seleccionar formulaciones adecuadas para cada condición de servicio. Esta elección debe estar basada en variables cuantificables como la viscosidad, el punto de ablandamiento, la penetración y la recuperación elástica, todas ellas vinculadas directamente con las propiedades del asfalto.
El uso de asfalto mezclado en caliente continúa siendo indispensable en obras de infraestructura vial que demandan una compactación eficiente y un alto desempeño estructural. La caracterización del ligante y un estricto control de calidad en planta son aspectos clave para asegurar que la mezcla asfáltica responda adecuadamente a las condiciones de servicio y cumpla con los requisitos funcionales del pavimento.
Referencias
Fuente propia